Las minicasas están de moda. Unas viviendas que permiten tener un modo de vida más sostenible y vivir en pequeñas parcelas rodeado de naturaleza y alejado del estrés de las grandes ciudades. Aunque este sector cuenta con una alta competencia, con modelos de lo más interesantes, como es el caso de Freeland, una minicasa hecha en España, o de Bofin y Lisa, que tienen dos plantas y se pueden llevar remolcadas. Lo más reciente es una casa pequeña con un diseño sencillo combinado con un interior lujoso. 

Ubicada en el bosque de Queensland, en Australia, esta minicasa funciona con paneles solares y es un claro ejemplo de que este tipo de viviendas pueden ser sencillas y lujosas al mismo tiempo. El diseño de este espacio es obra de la propietaria del hogar, Jess, que utiliza su cuenta de Instagram para contar cómo es vivir en este lugar aislado que ofrece una sensación de privacidad y respira naturaleza por todas partes. 

La minicasa cuenta con numerosas ventanas con las que disfrutar de vistas panorámicas y un diseño exterior de color negro. Una de sus particularidades es que debido a sus grandes claraboyas la instalación de paneles solares en el tejado era inviable, por lo que su creadora solucionó este problema construyendo un pequeño remolque solar independiente para colocar las placas fotovoltaicas en una ubicación óptima para capturar la luz solar durante todo el año.

Sencilla y lujosa

La propietaria cuenta en un vídeo de YouTube que el terreno para la minicasa lo encontró a través de Facebook, ya que se había mudado de a la ciudad por trabajo y no conocía a nadie. También explica que su vivienda tiene una longitud de 8,4 metros con un remolque de 1,8 metros y una altura de 4,3 metros.

Además, se decidió por un diseño moderno y limpio con presencia de muchas ventanas para dejar entrar la luz natural. En su interior se puede encontrar paneles de colores que se encargan de separar los espacios de la minicasa. 

El vídeo muestra claramente que el interior de la casa es bastante amplio y que se ha diseñado para integrarse con el bosque que le rodea. Un diseño que es simple y que ofrece una sensación de lujo, ya que además de funcional no cuenta con adornos ni nada que resulte excesivo.

Se puede apreciar una decoración sencilla, con cuadros y vegetación, y una amplia iluminación que ofrecen un espacio interior ideal para desconectar de todo. La minicasa también incluye una espaciosa cocina con suficiente espacio para guardar comida y los utensilios, y una gran nevera de gas.

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También tiene un dormitorio, una zona de estar, una amplia ducha con dos cabezales y un baño de compost, es decir, que no utiliza agua, sino que funciona a través de la fermentación aeróbica, por lo que se puede colocar en cualquier parte. 

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