Los seres humanos y sus actividades generan miles de millones de toneladas de CO2 cada año. La situación está fuera de control y el ser humano debería tomar medidas, ya que el medioambiente se está resintiendo; como ejemplo tenemos el aumento de las temperaturas en la Tierra.

Por suerte, el ingenio del ser humano también puede utilizarse para salvar al planeta. Un grupo de expertos cree que ha dado con la solución para paliar la contaminación: islas artificiales capaces de convertir el C02 en combustible.

Miles de islas capaces de reciclar el C02

Investigadores suizos y noruegos han unido fuerzas para intentar remediar la contaminación que generamos año tras año. Éstos han publicado un estudio en el PNAS, una revista científica estadounidense, según el que la solución podría revertirse gracias a la creación de islas artificiales a gran escala.

Cada una de estas islas tendría que contar con una gran cantidad de paneles solares, miles de ellos; convirtiendo así la luz del Sol en energía. La electricidad generada serviría para extraer el dióxido de carbono del mar.

placas solares

No contentos con ello, también se usarían los gases recogidos para transformarlos (mediante una reacción química) en metanol; un combustible alternativo que puede utilizarse en automóviles.

¿Dónde situar tantas islas?

La idea parece excelente; sin embargo, no sería la primera buena idea que se va al garete por ser difícil de ejecutar. Según los investigadores las islas tendrían que ubicarse en zonas con muy baja probabilidad de huracanes y donde las olas no superen los 7 metros de altura; además de un lecho marino que no esté por debajo de los 600 metros, básicamente para poder estabilizarlas y anclarlas como es debido.

Islas Dinamarca

Los autores indican que sitios como Australia, la costa de América del Sur y zonas del sudeste de Asia serían ideales para las islas. Eso sí, sería un plan con un coste elevadísimo, ya que se necesitarían algo más de 3 millones de islas artificiales para poder erradicar las emisiones mundiales de CO2. Como es obvio, cada una de estas islas tendría que contar con miles de placas solares.

Sería increíble que este proyecto se hiciera realidad; no obstante, lo vemos bastante complicado. Muchos líderes mundiales aplauden al oír este tipo de ideas, pero desaparecen nada más escuchar el dinero que tendrían que poner para ello.

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