La Tierra alberga una infinidad de especies de todos los reinos conocidos de los seres vivos.

Muchas de ellas están debidamente documentadas y registradas, pero otras tantas siguen por ahí escondidas, esperando a que algún científico de los que no pasan todo su tiempo en los laboratorios termine por encontrarlas.

Esto es algo que ocurre continuamente, aunque algunos años son más prolíficos que otros. Desde luego no podemos quejarnos de los descubrimientos del año pasado, ya que fueron de lo más variopintos. Y si no lo creéis ojo a una recopilación  hecha por New Scientist, basándose en los datos de investigadores medioambientales de la Universidad Estatal de Nueva York  sobre nuevas especies descubiertas en 2015. 

Una nueva Tortuga de las Galápagos

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Darwin sabía lo que hacía al centrar sus viajes en las Islas Galápagos, ya que suponen un gran reservorio de nuevas especies magnífico.

Las tortugas gigantes son un gran ejemplo de los animales curiosos que se pueden encontrar allí; aunque, desgraciadamente, ni siquiera su gran esperanza de vida puede impedir que poco a poco se vayan extinguiendo.

Sin embargo, el año pasado llegó una gran noticia con el descubrimiento de una nueva especie, que se convierte en la undécima registrada dentro de esta gran familia. Se trata de Chelonoidis donfaustoi, que resulta muy similar a otras ya conocidas de la isla,a pesar de contener un material genético diferente.

Viven en el centro de la Isla de Santa Cruz y sólo parece haber 250 individuos, así que nada más ser descubierta ya se encuentra en peligro de extinguirse.

Un caballito del diablo de colores espectaculares

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Cuando nos piden que nombremos un insecto bonito normalmente lo primero que nos viene a la cabeza son las mariposas, pero la verdad es que las libélulas o caballitos del diablo no se quedan para nada atrás.

Un buen ejemplo es el de una nueva especie, descubierta el año pasado en Gabón, que ha sido bautizada con el curiosos nombre de Umma gumma. Este término, además de ser el nombre de uno de los discos de Pink Floyd, también es un término del argot británico asociado al sexo y, del mismo modo que no es una casualidad que se llame así el álbum de la famosa banda inglesa, tampoco lo es que se haya bautizado con él a este insecto, ya que sus colores deslumbrantes llevan a que incluso su acto de apareamiento resulte un maravilloso espectáculo.

Crustáceos incoloros

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Este crustáceo, bautizado como Iuiuniscus iuiuensis y descubierto el año pasado en Brasil, no tiene colores llamativos ni un magnífico caparazón, como la mayoría de sus parientes, pero lo compensa siendo un animal la mar de trabajador.

Y es que, consciente de su vulnerabilidad de cara a los depredadores, pasa gran parte de su tiempo elaborando unas curiosas viviendas de barro en las que se enclaustra durante el periodo de muda.

Plantas carnívoras gigantes

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¿Cómo os imagináis a los científicos que descubren nuevas especies cada año? La imaginación da mucho de sí y es posible que tengáis ahora mismo en mente a señores vestidos a lo Indiana Jones, armados con cámaras de última generación y otros artilugios indispensables para capturar la imagen adecuada en el momento adecuado.

Pues bien, en el caso de esta planta, llamada Drosera magnifica, sólo bastó con observar algunas fotos de Facebook, ya que a veces las imágenes de nuestras vacaciones sirven para algo mas que para dar envidia a los amigos.

Se trata de una planta carnívora gigante, de más de un metro de longitud, que sólo parece crecer en las montañas de Brasil.

Dragón marino rubí

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El año pasado, el esqueleto preservado de un dragón marino hallado en Australia Occidental puso de manifiesto que estos animales ocultan mucho más de lo que creíamos hasta ahora.

Si al leer el término dragón marino estáis imaginando un cruce entre kraken y dragón de los de Juego de Tronos quizás os decepcione saber que no tiene absolutamente nada que ver, pero no por eso deja de ser enormemente interesante.

Estos animales, más bien parecidos a un caballo de mar, contenían hasta el año pasado dos especies: el dragón marino con hojas y el común, pero el hallazgo de este esqueleto supone la existencia de una nueva especie, bautizada como Phyllopterix dewysea, que se convierte en el primer dragón marino descrito en los últimos ciento cincuenta años. ¿Quién sabe cuántos más habrá por ahí?

Una nueva especie de rape, aún más fea que las anteriores

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El rape es uno de los peces más feos que podemos encontrar en el agua, pero aún así nos sigue sorprendiendo la apariencia de las nuevas especies descubiertas. Éste es el caso de la hembra hallada el año pasado en el Golfo de México, cuya protuberancia carnosa situada sobre su cabeza demostró que se trataba de una nueva especie, a la que se bautizó como Dinema lasiognathus.

Un nuevo familiar del ser humano

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Cada dos por tres aparecen nuevos eslabones de la cadena que llevó hasta nuestra especie, despertando el odio de los jóvenes estudiantes que cada vez tienen más Homos de nombres extraños que estudiar.

Un buen ejemplo es el de Homo naledi, cuyo cráneo se halló el año pasado en una cueva de Sudáfrica, acompañado de restos de otros 15 individuos. Esta especie parece similar a los humanos modernos en tamaño y peso e incluso es posible que sus manos y sus pies también se parecieran, aunque el cráneo se parece más al de otros antepasados menos evolucionados, pertenecientes al género Australopithecus. 

¿Qué os ha parecido la lista? Tiene de todo, ¿verdad? Peces, insectos, reptiles gigantes, plantas carnívoras e incluso uno de nuestros parientes lejanos. Y si esto es sólo una pequeñísima selección de todo lo que se encontró en un año imaginad lo que debe quedar por ahí esperando. ¿No os resulta apasionante?