El pasado fin de semana se celebraba en la provincia andaluza de Cádiz el característico Carnaval. Un evento que reunía a jóvenes (y no tan jóvenes) de todos los rincones de la península ibérica para festejar, beber, y disfrutar. Sucesivamente, y de forma inesperada, fueron llegando a los centros de salud gaditanos jóvenes cuya sintomatología señalaba la infección del archienemigo gastronómico: La salmonella.

Vómitos, diarrea, malestar, fiebre, dolores agudos de estómagos, y en un caso, la muerte de un joven de 26 años. El total de víctimas de este patógeno ha ascendido a 86, registrándose enfermos en otras ciudades gaditanas, e incluso Sevilla y Granada.

¿Alerta o caso puntual?

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Tras la oleada de enfermos en los diferentes hospitales andaluces, se empezó a hablar de una epidemia de Salmonella a gran escala, y debido a la falta de un control de calidad ejercida en alguna partida de huevos o producto derivado. Lo que empezaría con la muerte de una persona de 26 años agravó la situación, por lo que se dispararon las medidas de precaución y la población se mantuvo a la espera de más información.

Después de agrupar la información detallada por los enfermos, la investigación derivó a un bar de Cádiz dónde consumieron algún tipo de producto derivado del huevo, que el dueño del local no ha confirmado y que aun está por detallar.  Carnaval, Cádiz, Salmonella, Bar… las piezas encajan, y lo que un principio hizo temer una epidemia en la comunidad autónoma de Andalucía, nos indica que fue motivo de la falta de higiene en lo que consideraríamos el foco de infección de Salmonella en Cádiz.

Alerta en la cocina

Esta bacteria la podemos encontrar tanto en aves crudas, huevos, la carne vacuna, e incluso en vegetales y frutas sin lavar. Un producto comercial que tenga un certificado de calidad asegura que llegue al segundo comercio, que en nuestro caso sería el bar o restaurante, dónde se produciría la manipulación y transmisión de la salmonella.

El conjunto de los 86 casos lo entenderíamos mejor si también consideramos que la salmonella se puede transmitir vía sexual. Además, el periodo de incubación cifra entre las 12 y 36 horas, y casos de 6 horas. Hacemos números, contemplamos que se haya podido compartir el producto alimenticio que portaba la salmonella y el resultado puede apuntar a un simple local.

¿Cómo podemos tratarla?

1. Identificarla. Los síntomas son bastante comunes en otro tipo de enfermedades menores, y aunque la salmonella de por presente un alto riesgo para nuestra salud, en personas que tengan un sistema inmunológico comprometido, o posea algún tipo de enfermedad cardiaca o intestinal, puede sufrir la muerte.
2. Acude al centro de salud más cercano. Nadie va a verificar mejor que tú la enfermedad que padeces, así que no dudes en acudir al servicio de urgencias más cercano y que te haga una observación un especialista.
3. Toma los medicamentos necesarios. Tu médico te recetará un rango de medicamentos que tratarán los síntomas de la salmonella. Por tu parte toma mucha agua.
4. Dieta. Evita los alimentos picantes, ya que pueden agravar la condición en tu intestino, por lo que elige una dieta blanda y con poca comida rica en grasas.
5. Descansa. El descanso es la mejor terapia natural, agilizará tu recuperación y te ayudará a volver con las pilas cargadas al trabajo, tu actividad física o la escuela.
6. Informate. Si conoces que la infección se debió a la ingesta en un local, recuerda que la higiene del mismo tiene que ser importante para futuras elecciones. Si pudo ser por la manipulación indebida de un alimento de tu propio hogar, infórmate sobre las medidas que debes tomar para mantener tus alimentos frescos y seguros.

Fuente | Foco de infección: Diario de Cádiz