Hay veces en las que te puedes encontrar con más de una agradable sorpresa cuando miras al espacio, como esta foto de 570 megapixels del cometa Lovejoy.

No es un cometa cualquiera, es el cometa Lovejoy, que en estos momentos se encuentra a más de 82 millones de kilómetros de la Tierra. La foto es bonita, pero su secreto está en que no se ha conseguido por los métodos habituales, y gracias a eso tiene ese color verdoso tan llamativo.

Y es que esta fotografía en realidad es accidental. La tomó el Observatorio de la Energía oscura, que se dedica al análisis óptico y de infrarrojos cercanos de la bóveda celeste, con el objetivo de desvelar de una vez el misterio de la energía oscura que en teoría está provocando la expansión del universo.

El cometa Lovejoy como nunca lo habíamos visto

cometa lovejoy 1

Lo curioso de la imagen es que en realidad el objetivo nunca fue el cometa; en realidad los astrónomos estaban estudiando una zona en concreto cuando se encontraron con que el cometa les había “fastidiado” las fotos apareciendo delante. Su color verde se debe al carbono en forma de C2 que produce fluorescencia en ultravioleta.

La imagen de 570 MP en realidad está formada por varias fotografías tomadas en ese momento y que no sirvieron para la investigación de la energía oscura, pero a cambio nos regaló una imagen (aquí en resolución completa) para el recuerdo y una ayuda para comprender la composición de los cometas.