Yo soy muy llorona, y muchas personas me dicen que es algo bueno, que haciéndolo elimino penas y pesares. Del mismo modo que la carcajada, a través de la cual se desprenden emociones intensas y muy beneficiosas, el llanto ofrece también una salida emocional importante y fructuosa.

No en vano, el llanto es nuestra forma primigenia de comunicación, cuando no sabemos hablar y necesitamos comunicarnos de algún modo con las personas a su alrededor e infórmalas sobre nuestras necesidades. Con el tiempo, pasamos a emitir lágrimas para expresar sentimientos de tristeza, emoción, alegría, rabia o dolor. Y la expresión de estas emociones a través de las lágrimas es única en el ser humano.

Lágrimas beneficiosas

Llorar resulta más beneficioso para la salud que aguantar y reprimir el llanto. He aquí algunas de sus bondades:

• Actúan como calmantes naturales. Las lágrimas pueden ser una buena forma de dar salida al estrés, pues eliminan las “toxinas” generadas por el mismo, como leucina encefalina y prolactina. El llanto también disminuye los niveles de manganeso, el cual que desencadena la ansiedad, el nerviosismo y la agresividad. Por lo tanto, las lágrimas mejoran el estado de ánimo. Investigadores del Centro Médico St. Paul- Ramsey (Minnesota, Estados Unidos) confirmaban en una de sus investigaciones que el 90% de los participantes del trabajo experimentaban un cambio de ánimo positivo después de llorar. Además, se sentían menos estresados.
• Mantienen la humedad del ojo y, por su contenido en proteínas y otras sustancias, ayudan a conservar la salud del ojo y a combatir infecciones. De esta tarea se encargan las denominadas lágrimas basales, presentes de forma constante en el ojo.
• Ayudan a poner de relieve aquello que nos importa y aquello en lo que necesitamos enfocar nuestra atención.
• Nos devuelven a un estado de equilibrio. Lauren Bylsma, experta de la Universidad de Pittsburgh (Estados Unidos) que realizado muchos trabajos sobre las lágrimas y el llanto, indicaba en uno de sus estudios que una de las teorías del llanto es que éste ayuda al cuerpo a volver a un estado de homeostasis tras haber sido excitado. Y eso implica tanto al llanto por dolor como al llanto por alegría. Las lágrimas podrían ayudar a que la persona retorne al nivel basal de funcionamiento. En otras palabras, a medida que las lágrimas resbalan por las mejillas, disminuye el nivel de angustia.

Socialmente débiles

A pesar de todos los beneficios listados, socialmente llorar incorpora una connotación de debilidad. Por ello, muchas personas se cohíben, muchas veces inconscientes de la importancia de poder llorar de vez en cuando. Por ello, como se indica en este artículo de Consumer, “es crucial que desde la infancia se eduque a los niños para que expresen sus sentimientos y comuniquen sus emociones […] es una válvula de escape y, como ocurre con una olla a presión, si una persona las reprime al límite y no se permite derramar lágrimas cuando lo necesita, cuanta más presión tenga, esa emoción se manifestará de forma más incontrolable”.

Fuente | everyday HEALTH, Consumer