Procedente de la planta del opio, la morfina es un analgésico que comenzó a usarse a principios del siglo XIX. Se le atribuyó el nombre de morfina en honor al dios del sueño Morfeo, vista su eficacia para tratar el dolor mediante periodos de somnolencia. En la actualidad, se utiliza para paliar diferentes fuentes de dolor, pero con algunas restricciones. Hasta este punto bien, pero, ¿que relación tienen el café y la morfina?

Investigadores de la Universidad de Brasilia y de la empresa agrícola y ganadera estatal de Brazil, Embrapa,  han descubierto una proteína en el café con efectos similares a la morfina. El equipo de Embrapa logró identificar fragmentos de una proteína – péptidos – hasta el momento desconocidos, presentes en el café y con efectos sedantes y analgésicos. Estos efectos se equiparaban a los de la morfina, pero con una ventaja:

Los efectos de las proteínas del café son más duraderos que los de la morfina

Llevados a la práctica, los efectos de estos péptidos en ratones mostraban una diferencia positiva frente a los producidos por la morfina. El estudió identifico 7 péptidos involucrados en la aparición de los efectos analgésicos y sedantes, y ambas instituciones no dudaron ni un segundo en solicitar la patente para estos péptidos opioides.

Esta curiosa relación no apareció como por arte de magia, sino como es tradición en la ciencia, grandes descubrimientos se hallan por errores empíricos o simple casualidad. De tal forma que el descubrimiento fue a parar a manos de Felipe Vinecky, investigador en el departamento de biología molecular de la Universidad de Brasilia.

Gracias al trabajo de Embrapa, Vinecky pudo analizar el genoma del café, con el objetivo de mejorar la calidad de la semilla. Mientras analizaba el genoma del café y algunos de sus productos proteicos, Vinecky se percató de que algunas de las proteínas que se sintetizaban eran similares a proteínas humanas. A partir de este punto, Vinecky y su compañero de investigación Carlos Bloch decidieron sintetizar y probar sus análogos estructurales, llegando finalmente a los resultados de este estudio.

Este descubrimiento no solo nos acerca un poco más la ciencia de un producto que forma parte del día a día de una gran parte de la población, sino que además podrá suponer el comienzo de la síntesis de analgésicos a partir de un producto más económico. Embrapa afirma que el descubrimiento posee un gran potencial biotecnológico, en primer lugar en la industria alimenticia, y en un segundo lugar para los controles de calidad ganaderos, minimizando el estrés de los animales en el matadero.

Fuente | Universidad de Brasilia