Todos conocemos la historia bonita. El 20 de Julio de 1969 el Apolo 11 puso a los astronautas Neil Armstrong y Buzz Aldrin en la Luna por primera vez. Pero minutos antes del alunizaje, un error pudo haber hecho fracasar la misión por completo.

La NASA y los astronautas a bordo del Apolo 11 pueden dar las gracias a Margaret Hamilton, porque de no ser por su excelente trabajo de programación del software de la misión es muy probable que el alunizaje su tuviese que haber abortado.

El Apolo 11 y la ingeniería de software

Solo 30 minutos antes de que el Apolo 11 fuese a aterrizar sobre la superficie de la Luna saltaron las alarmas 1201 y 1202 en los ordenadores de la nave. El sistema estaba sobrecargado con información debido a un error con el radar de rendezvous, un elemento que no tenía que haber intervenido en las fases de frenado y aproximación.

El ordenador del Apolo 11 estaba diseñado para funcionar como máximo al 85% de su procesamiento, dejando un 15% para situaciones de emergencia, extra que el radar derendezvous llenaba en ocasiones (lo que hacía saltar las alarmas). Afortunadamente Margaret Hamilton había diseñado un sistema asíncrono que permitía dar prioridad a las funciones imprescindibles, descartando las que no lo eran.

Gracias a esto el Apolo 11 pudo salvar una situación muy comprometida que habría sobrecargado el ordenador y pudo alunizar con éxito. Margaret Hamilton llegó a afirmar en una carta en 1971 que si el ordenador no hubiese reconocido este error, el Apolo 11 no habría aterrizado en la Luna.

De hecho, hasta tal punto fue importante el trabajo de Hamilton en este sentido, que a ella se le atribuye el acuñamiento del término ingeniería de software.

Aquí el vídeo del momento en el que salta la alarma 1201 en el Apolo 11: