Siguiendo con la estela de lo que tus ojos pueden decir sobre tu salud, o el artículo más reciente sobre lo que tu boca puede decir sobre tu salud, hoy os hablaremos sobre lo que un simple apretón de manos puede llegar a decir sobre nosotros. Parece algo fácil y con poco sentido para la salud, pero parece que los investigadores de la Universidad Stony Brook y del Instituto para el Sistema de Análisis Aplicados en Estados Unidos no piensan igual, ya que han realizado un estudio al respecto.

La intensidad de un apretón de manos dice mucho sobre tu salud

Según comentan estos científicos, la fuerza con la que damos un apretón de manos podría ser directamente proporcional a nuestra discapacidad, deterioro cognitivo, propensión a enfermedades o incluso podría indicar nuestra futura mortalidad. Al menos, eso indican sus resultados.

Para llegar a tales afirmaciones, tanto Warren Sanderson como Serguei Scherbov revisaron más de 50 estudios a escala global y de todas las edades respecto a los apretones de manos, ya que es un saludo que se usa de forma muy común y a diario, y son datos fácilmente recuperables y analizables.

“El apretón de manos se mide fácilmente y la información sobre su intensidad se puede encontrar hoy en día en muchas de las encuestas más importantes sobre envejecimiento”

Curiosamente, hasta 45 de los 50 estudios sobre enfermedad y mortalidad determinaron que un apretón de manos suave estaría asociado a niveles más elevados de mortalidad, morbidez y peores resultados de salud y mayor tiempo de hospitalización. Es decir, sería un buen predictor de futura morbi-mortalidad.

Un simple saludo, directamente proporcional a la posibilidad de sufrir enfermedades

Según comentan estos investigadores, los ensayos sobre deterioro cognitivo confirman que existe una relación “muy fuerte” entre la intensidad de un apretón de manos y dicho deterioro, e incluso habría una gran relación con las enfermedades cardiovasculares. Concretamente, un apretón suave sería un buen indicador de algún problema de salud. Así lo afirman en su trabajo Sanderson y Scherbov, el cual se ha publicado en la revista PLoS ONE:

“Como muestran los estudios, se ha demostrado que el apretón de manos suave puede servir para predecir mortalidad, morbilidad y otros aspectos relacionados con la salud”

Uno de los ejemplos que nos dan es el caso de una mujer blanca de 65 años que no había acabado los estudios secundarios pero tenía la misma fuerza que otra de 69 años que había llegado a superar el bachillerato. Esto vendría a decirnos que sus edades biológicas serían equivalentes, y que poseer un nivel educativo bajo provocaría un envejecimiento más rápido. Pero, eso si, también comentan que esta relación entre la edad y la cognición desaparece una vez superados los 80 años.

Vía | BBC.