Aceptémoslo: el sexo vende. De hecho, probablemente por el mero hecho de usar esa palabra esta entrada reciba mas visitas de lo normal (en cuyo caso, no, aquí no hay sexo real, pero quédate, a lo mejor lees algo interesante). Y esto es algo que saben las compañías detrás de las redes sociales, que no quieren desperdiciar todas esas visitas, que se traduce en mas publicidad y mas beneficios. El gran problema es que, sobre todo en ciertas sociedades, el sexo está mal visto.

Sorprendentemente, da mala imagen asociarse con gente desnuda, lo cual deja a las compañías en una delicada situación: ¿permiten el sexo en sus redes para obtener visitas, o lo prohíben para lavar su imagen? Y, tal vez de manera predecible, la mayoría de las compañías ha decidido tomar el camino de en medio e intentar quedarse con todas las ventajas de ambas decisiones sin las desventajas.

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Tomemos el ejemplo de Tumblr, la red social porno por antonomasia. Es difícil entrar en la web sin encontrarse un pecho o un miembro desatado, tanto que se ha ganado cierta fama entre los usuarios. Con la compra de la red por parte de Yahoo, muchos creyeron que esta política de permitir (casi) todo se iba a acabar. Y la verdad es que la política ha cambiado, aunque no de manera tan flagrante. Lo que ha hecho Tumblr es eliminar los blogs de sexo de los resultados de búsqueda, tanto internos como provenientes de motores como Google.

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Así, Tumblr permitirá a los propietarios seguir colgando imágenes de actos indecentes, pero no los sacará a relucir cuando les pregunten. Algo que no ha gustado a parte de la comunidad, que cree que la compañía los está convirtiendo en un gueto, porque este movimiento los hace prácticamente imposibles de descubrir por un usuario cualquiera. Solo con un enlace directo en otro sitio podríamos descubrir un blog de sexo en Tumblr. Además, algunos términos que no son explícitamente sexuales como “gay” parecen haber sufrido también censura.

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Este es un problema al que otras compañías como Twitter también están enfrentándose. En la última actualización de la app para iOS y Android, el contenido que esté considerado como “desnudez, violencia o procedimientos médicos” será censurado por defecto, y si queremos verlo tendremos que dar un toque mas en un enlace. Llama la atención que se equipare la violencia con el cuerpo desnudo, y que no se pueda configurar para ver un tipo de contenido y no otro. Si se me permite estirar la comparación, es un modo de pensar muy estadounidense, donde un pecho provoca mas polémica que un disparo en la sien.

Al final, ambas soluciones tienen en común que no se prohíbe el sexo, porque hacerlo conllevaría una huida numerosa de usuarios hacia otros servicios que sí lo permiten. Por otra parte, ahora son dos servicios mas censurados que antes, buscando ese equilibrio, ese punto mágico en el que agradar a todo el mundo y obtener la mayor cantidad de beneficios.