Pero también han caído algunos regalos para los usuarios en forma de aplicaciones y servicios renovados como Google Maps o Hangouts. Y es éste último el que ha traído algo más de cola, no sólo por ser una actualización bastante deseada por muchos usuarios habituales del servicio de mensajería de Google, si no porque ha sido un cambio un tanto radical que no ha sido recibido de manera igual por todo el mundo.

Y es que parece que Google ha decidido dar portazo de manera total y absoluta a Google Talk pese a ser una digna, aunque algo desfasada, herramienta. Yo llevo usando Gtalk desde antes de que naciera Android, y durante todos estos años ha sido mi herramienta de comunicación no sólo con mi círculo más cercano, si no que también ha resultado ser una herramienta especialmente útil para mantener contactos profesionales. Liviana, sencilla y aunque carente de algunas funciones como la de compartir archivos o los chats grupales, seguía siendo una alternativa muy válida.

Actualizarse siempre ha sido algo positivo, puesto que una actualización incluye nuevas opciones, nuevas características que explorar y parches y arreglos en el código que refuerzan la seguridad de una aplicación. Una actualización siempre ha sido motivo de alegría, hasta hoy. Y es que Google ha decidido que Google Talk ya no tiene sentido con su actualización a Hangouts. No ha habido opción a realizar una transición escalada, ni siquiera se ha dejado un pequeño resquicio, una puerta aunque fuera pequeñita a que pudiéramos seguir disfrutando de Google Talk, con nuestras listas de contactos y la rapidez y flexibilidad de la misma.

gtalk

No puedo evitar sentir que la actualización a Hangouts es como una especie de imposición, y eso es lo que no me gusta. Puedo adaptarme a una aplicación en la que se añadan funciones que quizá no utilizaré, que me agregue por fuerza a más contactos de los que me gustaría tener o que tenga un aspecto distinto. Pero no me gusta la idea de que de un plumazo

No sé a vosotros, pero a mi Hangouts me crea una sensación extraña. Me alegra que Google ponga las pilas a un servicio que es bueno pero que se ha quedado desfasado, pero por otra parte Hangouts no me acaba de convencer. Me parece que le quedan muchas cosas por mejorar, y las que se han mejorado no han sido lo suficiente. La veo más lenta, más cargada y menos práctica que antes. Ahora no puedo evitar sentir cierta inquietud cuando me aparece alguna actualización de un servicio que uso habitualmente.