La deriva obsesiva de espionaje que está teniendo China en los últimos años está dando mucho de qué hablar más allá de los memes de Black Mirror. Numerosos titulares salen a diario hablándonos de los métodos de vigilancia que el país está implantando y que atentan directamente contra la privacidad y la capacidad de libertad de sus habitantes con cada vez más imaginativa. Ahora, los estudiantes más pequeños son las nuevas víctimas de esta falta de privacidad.

China ha vuelto a sorprender al mundo con los llamados “trajes inteligentes” especializados para los estudiantes chinos.  Más de 10 escuelas en la provincia suroeste de Guizhou y en la Región Autónoma de Guangxi Zhuang están ya implantando este tipo de trajes de la empresa Guanyu Technology, para “mejorar la asistencia y la seguridad”. Estos trajes harán una monitorización de la entrada y salida de estos infantes además de otras cosas.

Los trajes inteligentes que usa China para vigilar a sus estudiantes más jóvenes

Trajes inteligentes 1

Estos “uniformes inteligentes” poseen 2 sensores que se encargan de rastrear cuándo un estudiante está entrando o saliendo de los terrenos escolares, y automáticamente envía esa información tanto a los padres como a los maestros. Claro está que si el chico se fuga de la escuela o falta al colegio haciendo pellas, los padres y los maestros lo sabrán gracias a una alarma automática.

La tecnología del reconocimiento facial está implantada en estos trajes. Pongamos un ejemplo; un niño quiere despistar al traje y quiere cambiárselo a otro para que así uno salga mientras el traje crea que estás en clase. No se puede; los trajes están ligados al estudiante mediante este reconocimiento y en caso de falta de coincidencia también se lanzará una alarma automatizada.

Pero estos trajes no pueden estar sin lavar para siempre, a si que es más que razonable pensar que en caso de limpieza se rompan. Nada de eso: estos trajes pueden sobrevivir a 500 ciclos de lavado y temperaturas superiores a 150 grados Celsius, además de que son útiles para realizar compras, salir por la calle, etcétera. Están pensados para que se usen lo máximo posible.

Trajes inteligentes 3

Según el director de la escuela, Lin Zongwu, la tasa de asistencia ha mejorado desde que la tecnología entró en servicio de manera silenciosa en 2016, pero tampoco permite la más mínima desviación en el comportamiento. Sobre la preocupación de que los trabajadores del centro rastrearan a los niños, Lin lo niega diciendo que no ha notado nada.. E problema principal, más allá de la privacidad, es que cualquier político o funcionario de estas instituciones podría rastrear el comportamiento de estos niños. No hay que pensar mucho para imaginar la distopía que supone esto.

Además, ya no hablamos de adultos que son más que conscientes de la vigilancia a la que son sometidos a diario. Hablamos de niños los cuáles son susceptibles a poder ser vigilados por gente o con muy bajos escrúpulos o con un alto índice de peligrosidad. ¿Es esta rama la última que China debería tocar? Lo cierto es que ya es una realidad, y queda mucho tiempo para ver cómo progresa. Y no, no deja de dar miedo.

Imágenes: ABC News / The Verge / Engadget / Guanyu Technology.