El tocadiscos Pro-Ject A1.2 Omicrono
Así es el tocadiscos automático para reproducir tus vinilos sin miedos a que sufran arañazos: barato y muy fácil de usar
El fabricante austriaco Pro-Ject lanza la versión actualizada de su giradiscos automático con preamplificador de fono y tracción por correa.
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Tras varios años de subidas y cifras históricas, en 2024 la venta de vinilos en España parece haber tocado techo, con unas cifras que alcanzan los 33,8 millones de euros, algo por debajo de las de 2023. Sin embargo, la nostalgia melómana parece más fuerte que nunca, y eso también se traduce en un aumento de la oferta de tocadiscos de marcas como Audio Technica, que hace unos meses lanzó el AT-LP8X, diseñado para satisfacer las demandas de los entusiastas de la música en alta fidelidad.
El problema es que la mayoría de estas opciones, y más si añaden funciones semiautomáticas o completamente automáticas, implican unos precios elevados. Por eso, el fabricante austriaco Pro-Ject acaba de lanzar el segundo modelo de Automat, el A1.2, que elimina de la ecuación ese gesto de posar con la mano la aguja en el vinilo, lo que puede provocar deslizamientos indeseados o arañazos en la superficie de los discos.
La otra gran novedad que incorpora este modelo es un nuevo plato de aluminio fundido a presión, con corte mecanizado CNC equilibrado con precisión, lo que promete una "reproducción perfecta". El sistema de accionamiento automático también se ha actualizado para ofrecer mayor precisión, y basta con pulsar el botón de start situado en el chasis de madera que amortigua la resonancia para iniciar la reproducción.
El tocadiscos Pro-Ject A1.2 Omicrono
El motor electrónico depende de una correa, encargada de girar el plato a 33 o 45 rpm. El brazo de aluminio ultraligero finaliza en un cabezal de fibra de carbono diseñado específicamente para este modelo, y el cartucho Pick it MM E se encarga de ofrecer un sonido de alta calidad.
El conjunto garantiza una "extraordinaria rapidez de respuesta y detalle en términos de transitorios y microdinámica", según Pro-Ject. En cuanto a los ajustes de antiskating y la fuerza de tracción vienen ajustados de fábrica al nivel óptimo, eliminando uno de los habituales quebraderos de cabeza a la hora de poner en funcionamiento y calibrar estos dispositivos para lograr los mejores resultados.
Para no afectar al sonido, el mecanismo automático se desactiva durante la reproducción y se activa cuando detecta que la aguja ha llegado a los últimos surcos del disco. En ese momento, el brazo se levanta, vuelve al soporte y se apaga el motor, aunque el A1.2 también dispone de una palanca de elevación manual, por si el usuario desea interrumpir la reproducción en cualquier momento. Para quien no disponga de un amplificador en su equipo de música, el tocadiscos integra un preamplificador de fono, aunque también se puede desactivar.
Las mejores noticias en torno a este giradiscos fabricado a mano en Europa están relacionadas con la disponibilidad, a partir de mayo, y el precio recomendado, que es de 499 euros, la mitad que la mayoría de opciones equiparables disponibles actualmente en el mercado.
