Los primeros momentos de la pandemia en España tuvieron una serie de consecuencias inesperadas para muchos. Una de ellas fue el auge de las videollamadas y de las videoconferencias, lo que a su vez provocó una edad de oro para las webcam. Un bien que pasó de ser útil sin más a un elemento imprescindible. La firma Opal, que destacó enormemente con su primera cámara, ahora vuelve a la carga con una nueva cámara premium.

Los usuarios más tecnológicos recordarán la Opal C1, una cámara pequeña y de diseño que destacó enormemente por sus características. Creada por exingenieros de Google y Uber, esta C1 prometía vídeo y foto con una calidad similar a la de una DSLR, logrando así el apoyo de inversores como Alexis Ohanian, cofundador de Reddit. Ahora, lo vuelven a intentar, esta vez con la Opal Tadpole.

"La webcam más pequeña jamás construida". Así la definen sus desarrolladores, que explican cómo este modelo para portátiles cuenta con un sensor similar al de una cámara mirrorless de Sony, emulando las principales características de estas cámaras profesionales en un cuerpo diminuto. Eso sí, a un precio nada desdeñable de 175 dólares, o lo que es lo mismo, 161 euros.

La Opal Tadpole

Primero, repasemos las características técnicas. Estamos ante una cámara desarrollada en aluminio pintado y anodizado 6K, cuyo cuerpo casi está ocupado en su mayoría por el propio sensor de la cámara. De hecho, sus dimensiones son diminutas; 35 milímetros de alto, 45 de ancho y 20 de profundidad. Solo pesa 35 gramos, y se engancha a la pantalla con un clip de silicona.

Se conecta mediante USB-C y su conector es completamente táctil. Porque sí, la cámara tiene funciones táctiles capacitivas con LEDs integrados en el conector principal que se engancha al dispositivo. Esta función permite con un solo toque silenciar la cámara, para que no se escuche nada en absoluto. Eso sí, el cable es USB 2.0, un pequeño downgrade respecto a otros modelos del mercado.

Opal Tadpole. Opal Omicrono

El sensor que usa esta cámara es el Sony IMX582 Exmor RS, el mismo sensor de cámara que llevan teléfonos como el Poco F3, el X3 Pro o el Black Shark 4. Un sensor que si bien no es de gama ultra alta, está aderezado por un procesado de imagen espectacular, tal y como ocurría con la primera Opal, la C1. Su amplitud de campo es de 70 grados, y la resolución es de 48 megapíxeles.

Usa auto enfoque por detección de base y su apertura es de F/1.8. Puede grabar 1080p hasta un máximo de 30 fps y por supuesto tiene micrófono integrado. Más concretamente, tiene una serie de micrófonos direccionales VisiMic que captura únicamente lo que la cámara capta con su sensor. Opal explica que las ondas sonoras atraviesan un túnel sónico interno, por lo que no se graban sonidos que estén fuera del rango de visión de la Tadpole.

Opal Tadpole. Opal Omicrono

Otros detalles incluyen una pequeña correa trenzada que hace las veces de cable y además un pequeño estuche de transporte para llevar la cámara encima bien protegida. Debido a su clip, calza en prácticamente cualquier portátil, aunque lógicamente es compatible con todo tipo de ordenadores, ya sean Windows o Mac.

Como decimos, esta Opal Tadpole se puede comprar tanto en blanco como en negro, y como decimos, su precio es poco superior a los 160 euros. Actualmente no se puede comprar en territorio español, aunque Opal hace envíos a todo el mundo. Una cámara que sabrá sustituir la de tu portátil Windows o la de tu MacBook fácilmente.

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