Pese a la fama de frágiles que tienen los iPhone en España, la historia ha demostrado que los teléfonos de Apple tienen mucho que decir sobre su durabilidad. No son pocos los casos de iPhones que han sufrido en condiciones extremas y han sobrevivido a ellas. El último caso, según recoge la BBC, es el de un iPhone que ha aguantado 10 meses en el fondo de un lago y ha sobrevivido a ello.

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Todo comienza con Miguel Pacheco, usuario que estaba navegando las aguas del río Wye, en Cindeford (Inglaterra). Mientras estaba en su canoa, Pacheco pudo observar algo azul en el agua y la curiosidad hizo que lo recogiera. Su sorpresa fue mayúscula cuando se encontró un iPhone en las aguas del río.

Un terminal que, evidentemente, no era suyo. Pertenecía a Owain Davies, que perdió su teléfono 10 meses atrás mientras paseaba también en canoa por ese mismo río, en una despedida de soltero. Lo más sorprendente es que Davies pudo recibir de vuelta su teléfono totalmente funcional.

Un iPhone bajo las aguas

Cuando Pacheco lo recogió, según relata la BBC, pensaba que el teléfono no funcionaría. "Pensé que no estaría bien. Estaba lleno de agua", explica. Tuvo que hacer un gran esfuerzo para sacar el teléfono del agua y secarlo, pensando que podía haber recuerdos importantes en su interior.

Recordemos que los teléfonos de Apple, al menos desde el iPhone 11, cuentan con la clasificación IP68 según la norma IEC 60529. Eso quiere decir que se pueden sumergir hasta un máximo de 2 metros y durante un máximo de 30 minutos, unas cifras que han aumentado ligeramente con los últimos modelos.

Pacheco, oriundo de Drybook (Gloucesteshire), secó el teléfono con un compresor de aire, dejándolo toda la noche allí a la espera de que, milagrosamente, el teléfono sobreviviera. Y así lo hizo: cuando conectó el cargador al dispositivo, sorprendentemente se cargó. "Por la mañana, cuando lo puse a cargar, simplemente no podía creerlo".

Cuando el iPhone 'revivió', el fondo de pantalla reveló a un hombre y a una mujer con una fecha, el día 13 de agosto. Pacheco hizo bien, ya que publicó estas fotos en un grupo local de Facebook, desde el cual se compartieron más de 4.000 veces. Los amigos de Davis reconocieron tanto a su compañero como a su prometida, Fiona Gardner, los cuales residen actualmente en Edimburgo.

Diez meses atrás, en agosto de 2021, Owain perdió su iPhone en el fondo del río Wye, y evidentemente pensó que nunca podría recuperarlo. "Estaba en una canoa para dos personas y mi compañero no debería haberse puesto de pie. No hace falta decir que nos caímos", relata Davis. "El teléfono estaba en mi bolsillo trasero y tan pronto como estuve en el agua, me di cuenta de que el teléfono no estaba".

Con sorna, Davis explica que él no hubiera hecho lo mismo. "Mi reacción natural sería entregarlo en el pub más cercano, no usar mi compresor de aire para secarlo", asegura. No obstante, agradece enormemente a Pacheco el esfuerzo realizado.

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