La Ninebot C30 es la nueva moto eléctrica de Xiaomi, y es muy diferente a todo lo que hemos visto, y al mismo tiempo, nos recuerda a las 'motillos' que vemos todos los días en las ciudades españolas.

Ninebot es una de las muchas startups en las que el gigante chino Xiaomi está involucrada, pero realmente demostró que había que tenerla en cuenta cuando compró a Segway, el conocidísimo fabricante de nuevas soluciones de movilidad.

Desde entonces, Ninebot se ha centrado en el desarrollo de nuevos vehículos eléctricos, incluyendo motos diseñadas para la ciudad; pero la que más papeletas tiene para cambniarlo todo es la C30, sin duda alguna.

La nueva moto eléctrica de Xiaomi

La Ninebot C30 es un ciclomotor eléctrico, claramente inspirado por modelos clásicos europeos, e igual de práctico. A diferencia de otras motos eléctricas centradas en aprovechar la nueva tecnología para mejorar el rendimiento, el objetivo de la C30 es llevarnos de un sitio a otro de manera barata y fiable.

La Ninebot C30 es un ciclomotor eléctrico dirigido a un público joven Ninebot Omicrono

Es un producto que tiene mucho sentido, especialmente en China y sobre todo, en los tiempos que corren donde compartir el coche puede ser un peligro para todos los ocupantes. Es por eso que en los últimos meses se ha notado un crecimiento en la venta de motos eléctricas en el país asiático.

Pero pocas son como la C30, y con eso nos referimos a lo barata que es. El precio de partida es de sólo 3.599 yuan (450 €), pero durante su lanzamiento llegó a estar disponible por 2.999 yuan (375 €); cifras muy bajas incluso para el sector de los ciclomotores.

Su misión, ser barata

Este no es un ciclomotor que nos vaya a sorprender con su rendimiento o características, pero tampoco lo pretende; de hecho, el único motivo por el que tiene pedales es por la regulación china, y se puede controlar de manera sencilla sólo con el manillar.

Ninebot C30 Ninebot Omicrono

La C30 alcanza sólo 25 km/h, insuficiente para meternos en autopista pero la velocidad a la que probablemente iban a ir todos sus usuarios de todas maneras en el tráfico de la gran ciudad.

Gracias a su peso de apenas 55 kg, la batería que tiene es suficiente para conseguir una autonomía de 35 km, ideal para un uso diario.

La Ninebot C30 no ganará ningún premio por originalidad ni por innovación, pero no le hace falta. Es justo lo que mucha gente llevaba tiempo esperando, una manera barata y sencilla de moverse por la ciudad, y sólo por eso ya puede ser una revolución en potencia.