El roaming desapareció el 15 de junio. Desde entonces, no cuesta dinero usar el teléfono en países miembros de la UE. No obstante, el 33% de los españoles sigue restringiendo el uso de datos.

A pesar de que hace ya 4 meses que podemos viajar por toda la zona Euro sin que nos cobren de más por estar en otro país, muchos españoles (y europeos, por supuesto) aún siguen pensando que deben desactivar los datos cuando viajan por la Unión Europea.

Efectivamente, hace ya 4 meses que la Unión Europea puso fin al temido roaming que nos cobraban cuando viajábamos a otros países integrantes de la zona euro. Hasta entonces, las compañías nos cobraban tarifas exageradamente altas por usar el plan contratado en otros países, alegando que necesitaban alquiler la red a las compañías de los países a los que viajábamos.

Este sobrecoste es perfectamente comprensible, pero la arbitrariedad de las tarifas (exacerbadamente altas, como decíamos), ha provocado que la UE acabe por regular en contra de ellas e ilegalizarlas por completo.

Se acabó el roaming, pero la gente sigue sin usar el teléfono en el extranjero

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No obstante, el uso de Internet y de llamadas de voz se ha disparado, y en algunos casos duplicado. Por ejemplo, las personas que realizan y reciben llamadas con la misma frecuencia que como lo harían en su país natal ha subido desde el 11% al 24% (más de doble), y el número de personas que usa los datos con normalidad ha ascendido desde el 15% hasta el 35% (también más del doble).

Es decir, que aunque el 70% de los españoles conozcamos que el roaming de pago como tal ya no existe, el español medio sigue sin usar su teléfono con normalidad en los países miembros de la UE, quizás por miedo.

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A estas cifras tenemos que usar otra quizás aún más interesante: el número de viajeros que no usó nunca el Internet en el extranjero, ni siquiera durante una sola conexión individual, bajó del 42% al 21%.

Solamente 3 de cada 10 españoles usa el teléfono con normalidad en el extranjero, justamente el mismo porcentaje de españoles que desconocen que hablar y chatear por toda la Unión Europea es gratis (teniendo una tarifa, por supuesto).