Tenemos la idea de que la refrigeración líquida es siempre mejor, pero podría no ser así.

Más de uno diría que la refrigeración líquida es mucho mejor siempre y en todas las condiciones. Es más cara, mucho más (más de 10 veces más cara) pero según los amantes de este tipo de refrigeración merece la pena sin duda alguna. Tendemos a pensar que por costar más rinde mejor, pero podríamos estar equivocados.

Pero no siempre es así. La tarjeta de procesamiento gráfica que presentó NVIDIA ayer para el deep learning (Inteligencia Artificial) no presentan un sistema puramente líquido, sino que viene con un sistema mixto. Si un ordenador tan caro (149 000 dólares) no lleva uno completo, ¿por qué lo ibas a usar tú?

¿En qué consiste cada una?

Refrigeración líquida

La refrigeración líquida es como la que tenemos en los motores de vehículos. Se usan líquidos que son buenos conductores térmicos (o que lo sean al menos más que el aire) y que absorben el calor de los componentes de nuestro PC. Esto es, procesador, tarjeta gráfica, RAM y alguno más en función del modelo. Luego este líquido se enfría al comienzo del circuito y comienza el ciclo.

Por supuesto está en constante movimiento, nunca deja de fluir líquido. Como podremos imaginar esto requiere una circuitería increíble. Hacen falta tuberías, un depósito (para evitar la cavitación o el burbujeo), un radiador (con su ventilador) y además una bomba (hidráulica) para que el movimiento del líquido sea posible.

Refrigeración Líquida

Lo más barato que encontraremos será por un precio de unos 60 euros (hasta unos 150 euros). Estos sistemas no requieren mantenimiento. Luego, los más caros, los que realmente son más eficientes (pues estos anteriores son puramente para decorar; y es que tienen un rendimiento parecido que los de aire), cuestan un poco más. Concretamente ese poco es a partir de los 350 euros.

Pero, efectivamente, este último sistema, aparte de costar casi 6 veces más que uno compacto (o 14 veces más que uno por aire, según se vea), necesitan un mantenimiento bastante importante. Entre otras cosas, es necesario cambiar el líquido cada cierto tiempo, además de purgar el radiador.

Refrigeración por aire

La refrigeración por aire, por el contrario, es extremadamente barata y simple. Suelen costar entre 25 y 30 euros (si queremos algo de calidad, si no, por 14 euros encontramos muchos). Aunque, eso sí, hay modelos más avanzados (generalmente modelos custom que cuestan algo más). Por supuesto no se trata de una serie de tuberías que refrigeran el ordenador por aire, sino que se trata de ventiladores.

An Efficiently Air Cooled PC (2)

Es, por lo tanto, el sistema que usan los ordenadores domésticos y los portátiles más antiguos. Se consigue menos eficacia que con el refrigerante líquido (como ya dijimos por su menor conductividad térmica) pero tiene otras ventajas muy claras: no hace falta mantenimiento y tampoco hace falta desembolsar mucho dinero.

Entonces, ¿cuál es mejor?

El presupuesto de los data centers se va, en gran medida (en un 40% concretamente), a los sistemas de refrigeración (es lógico, pues esos ordenadores tienen que ser lo más punteros posibles). Como es obvio pensar, hay que buscar la solución más económica y viable al mismo tiempo. Si bien es cierto que los sistemas de refrigeración líquida son más caros, también tienen una vida útil más larga y en sectores industriales se rentabiliza mucho más.

Pero, para uso doméstico, esto no funciona del todo así. Partamos, en primer lugar, que los ordenadores domésticos tienen una vida útil de 4 años. Partamos también de que el usuario medio usa el ordenador para ofimática o para ejecutar algún que otro juego (aún teniendo un ordenador medianamente potente).

pc-custom

En esta segunda situación está muy claro: no es necesario un sistema de refrigeración tan potente (descartamos el sistema líquido compacto, el de 50 a 150 euros, pues es tan eficiente como uno por aire que cuesta 5 euros).

Entre que no se va a maltratar tanto el procesador para estos usos, y entre que los ordenadores familiares no tienen una vida muy larga (donde sí sería más eficiente un sistema líquido), no merece la pena gastar tanto dinero por un sistema que realmente no se va a usar.

En definitiva, todo es depende del tipo de ordenador que queramos. Si estamos interesados en uno para sacarle rendimiento de verdad, y de forma diaria, lo mejor es sin duda alguna un sistema líquido (pero no de los cerrados, ojo, sino de los caros). En cambio, si no es así, no tiene apenas ventaja.