Las consecuencias psicológicas de los problemas del ordenador son más graves de lo que podríamos pensar.

Es una regla que siempre se cumple; si has usado un ordenador, llegará un momento en el que te frustrará, te confundirá o te cabreará. O todo lo anterior.

Parece que Microsoft por fin lo ha descubierto, por una encuesta que ha realizado a usuarios de equipos viejos; todo con el objetivo de hacernos ver que nuestros problemas son fruto de un ordenador con demasiados años encima.

Las consecuencias psicológicas de los problemas del ordenador

Los datos que obtuvo hablan por si solos; el 65% de los propietarios admitieron gritar o golpear el ordenador cuando sufrió un error.

Me atrevería a decir que esa cifra es muy superior dependiendo de dónde vivas y tu edad. Personalmente, lo difícil sería encontrar a alguien de mi entorno que no haya gritado o golpeado su ordenador; y no con equipos viejos necesariamente.

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Sería gracioso si no fuese tan triste; tal vez lo hacemos porque la computadora no puede responder. Aunque con los últimos asistentes personales probablemente pueda hacerlo.

Más grave que eso es que el 6% admitió que había llorado delante del ordenador o que incluso se dieron a la bebida. En efecto, hay gente que se frustra tanto con el ordenador que tiene que ahogar sus penas en alcohol.

Microsoft: “Compra un ordenador nuevo o si no…”

Por supuesto, esta encuesta de Microsoft tiene un motivo oculto (o no tan oculto); que compremos ordenadores nuevos.

Microsoft quiere hacernos ver que con un ordenador nuevo todos esos fallos y problemas desaparecerían.

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Por ejemplo, la encuesta llega a la conclusión de que dedicamos un día (23 horas y media) cada año sólo a encender el ordenador; por eso la compañía presume especialmente de que un equipo nuevo con Windows 10 tarda un 65% menos en arrancar.

No dudo de que si actualizas tu ordenador tendrás menos problemas, pero no te engañes. Los ordenadores no son máquinas perfectas, ni el software que los gobierna está libre de bugs.

Que algo malo ocurrirá tarde o temprano es más una certeza que una duda. Y al final, los que más sufrimos somos los usuarios.