
MQ-4C Triton
Así es Triton, el dron espía más avanzado de EEUU que Trump ha acercado a China: vuela a 15.000 metros durante 24 horas
Fabricado por Northrop Grumman, la Navy estadounidense operará este modelo tan específico de aeronave desde Japón para apoyar a Taiwán.
Más información: India ya está desarrollando su propia arma láser: así acabará con todo tipo de misiles y drones desde larga distancia
La declaración de la guerra comercial y arancelaria a China es solo una de las aristas de la pugna de Estados Unidos por mantener el statu quo de las últimas décadas. En el ojo de este huracán se encuentra Taiwán, uno de los principales aliados de Washington D.C. en la región, y la tradicional reclamación territorial de Pekín, que no ve con buenos ojos la independencia política y económica que se lidera desde Taipéi. Esta situación conduce a que desde el Pentágono se ordene el despliegue de efectivos a la zona, en los que se incluyen algunas de las aeronaves más avanzadas del mundo que no están presentes en España.
De esta forma, Estados Unidos ha anunciado el despliegue de drones de vigilancia de largo alcance en la base aérea de Kadena,prefectura de Okinawa, en la zona de islas del suroeste de Japón y muy cerca de Taiwán. Los protagonistas de este despliegue son los drones MQ-4C Triton, uno de los más avanzados de cuantos operan actualmente las Fuerzas Armadas del país norteamericano.
"Se espera que este despliegue mejore las capacidades de recopilación de inteligencia de la alianza Japón-Estados Unidos y, por extensión, las capacidades de disuasión y respuesta de la alianza", tal y como dijo Gen Nakatani, ministro de Defensa de Japón.

MQ-4C Triton
El mismo ministro comentó que el despliegue proporcionaría un impulso necesario en medio del repunte de la actividad militar china cerca de las islas del suroeste, tal y como recoge The Japan Times. Y señaló que "el entorno de seguridad que rodea a nuestro país se está volviendo cada vez más severo".
Un informe de la Fuerza Aérea estadounidense publicado en 2023 explica que la ubicación de la base aérea de Kadena la "convierte en un lugar de valor incalculable para operaciones ISR", haciendo referencia a las siglas en inglés de Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento, para "el acceso a numerosos puntos críticos potenciales en la región del indopacífico".
Dominio marítimo
El desarrollo del Triton se realizó a lo largo de la primera década de los años 2000. La Navy estadounidense —equivalente a la Armada en España— buscaba una aeronave no tripulada con la que realizar misiones de vigilancia y recolección de información para labores de inteligencia en el terreno marítimo.
En el programa, dotado de 1.160 millones de dólares, participaron Boeing, Lockheed Martin y Northrop Grumman, siendo estos últimos los que finalmente se llevaron el contrato por parte del Pentágono en 2008. Cuatro años después se llevó a cabo la ceremonia de presentación oficial del dron y al siguiente año —en 2013— la aeronave realizó su primer vuelo y el primer ejemplar se puso en servicio en 2018.

MQ-4C Triton
En paralelo, desde los cuarteles generales de la Navy comenzó a plantearse un recorte importante en el número de unidades que planeaban adquirir. En un primer momento, pretendían hacerse con un total de 68 MQ-4C Triton para su despliegue en las bases militares estadounidenses en todo el planeta, como Italia, Guam, Japón o Hawaii.
Los últimos datos aportados por la Navy respecto a esta plataforma son del 2023, cuando mencionaron la operación de 12 unidades y la adquisición de otras 15 para labores de entrenamiento y mantenimiento. Por otro lado, Australia anunció el año pasado la adquisición de 4 unidades en firme con opción a 3 más para el futuro.
El Triton "detecta, rastrea y clasifica objetos de manera rápida y segura volando más alto, durante más tiempo y de manera más eficiente, al tiempo que comparte datos rápidamente para permitir la coordinación militar", explican desde Northrop Grumman.
Se trata del "único avión marítimo autónomo de gran altitud y larga persistencia", explican. Puede operar a altitudes superiores a los 15.200 metros, durante más de 24 horas y con una autonomía de 13.700 kilómetros. Estas capacidades son, incluso, superiores a algunos aviones espía tripulados que operan actualmente y que estarán al servicio de la Navy y la inteligencia estadounidense para la detección de cualquier tipo de movimiento.
Dron Triton
"Un solo MQ-4C, con su alcance operativo ultralargo y gran altitud, combinado con operaciones simultáneas del conjunto de inteligencia múltiple, proporciona cuatro veces la cobertura ISR de otras plataformas autónomas", indican desde la compañía. La aeronave "puede ver más lejos, volar durante más tiempo [...] y tiene mayor capacidad de supervivencia que los sistemas no tripulados de altitud media".
Además de la vigilancia marítima, el dron puede realizar misiones de evaluación de daños en combate, monitorización portuaria y como repetidor de comunicaciones. También puede realizar operaciones de apoyo a otras unidades de aviación naval en diferentes escenarios como la guerra antisuperficie, gestión del espacio de batalla y la localización de blancos.
Contraparte china
Las Fuerzas Armadas comandadas desde Pekín también cuentan con algunas plataformas diseñadas para labores de espionaje. Una de las más modernas, que todavía parece no haber entrado en servicio, es la WZ-9 Águila Divina.
El WZ-9 se encuadra dentro de la categoría HALE (High Altitude, Long Endurance; igual que el Triton estadounidense), que le permite mantenerse a gran altitud durante mucho tiempo al mismo tiempo que emplea sus sensores a bordo. Estos son capaces de detectar y monitorizar objetivos con gran precisión, tanto en la superficie como los que vuelan a una altitud menor.

Diseño por ordenador del WZ-9
"Su diseño de fuselaje doble incorpora cúpulas en las secciones frontales, que permiten la integración de una gama de sistemas de radar avanzados", explica ex instructor del Ejército Popular de Liberación Song Zhongping, en SCMP. Estos sistemas están especialmente diseñados para "rastrear aviones furtivos, buques de guerra y submarinos a grandes distancias".
Las aeronaves a las que se refiere el experto son las clásicas furtivas que tiene operativas en la actualidad Estados Unidos, como los cazas F-35 y F-22 y el futuro bombardero B-21, que se encuentra en sus últimas fases de desarrollo.
"A diferencia de los drones convencionales, el WZ-9 integra funciones de recopilación de inteligencia y lucha contra el sigilo" de las otras aeronaves. Uno de los pilares de la plataforma es precisamente el sistema de alerta temprana diseñado para identificar amenazas aéreas a baja cota de vuelo.
La envergadura de este nuevo dron se sitúa en los 45 metros, debido a los dos fuselajes, con una longitud total de 15 metros. Datos clave como el alcance máximo o la autonomía en vuelo permanecen en secreto, aunque el papel de aeronave de alerta temprana requiere largos periodos de sostenimiento.