Cuando decimos que la guerra de Rusia con Ucrania no es convencional, lo decimos por muchos motivos. En España ya estamos acostumbrados a ver vídeos impresionantes que muestran tácticas de batalla completamente locas pero eficaces, que incluyen por ejemplo el uso de drones para 'colar' explosivos en las zonas más curiosas. El último vídeo en aparecer en la palestra muestra cómo un tanque ruso acaba destruido con esta técnica.

Según recoge la cuenta de Twitter UAWeapons, podemos ver un tanque ruso T-72B destruido en la zona de Donetsk. Para ello, se usa un dron que lanza directamente dentro del compartimento del conductor una granada F-1, provocando la combustión interna dentro del tanque y destruyéndolo.

La F-1 es la granada defensiva más común, y data de los años 40. Proviene de las épocas. dela Unión Soviética, y está basada en la F1 francesa, conteniendo una carga de 60 gramos de trinitrotolueno. A día de hoy, es una de las armas explosivas más usadas.

Un tanque destruido

El tanque T-72B visto en el vídeo es un tanque bastante longevo popularizado en la época de la Unión Soviética y actualmente usado por las fuerzas armadas de Rusia. Ha sido durante más de 3 décadas uno de los poquísimos carros de combate que se siguen construyendo en 5 países. De hecho, se considera uno de los carros de combate más producidos de todo el mundo, por debajo del famosísimo T-34.

El escudo de la parte superior y el montaje del vídeo revelan que el vídeo ha sido difundido por los principales canales de difusión ucranianos. El primer plano revela una vista desde el dron, presumiblemente con una cámara atada al propio dron, de modelo desconocido. Se posiciona justo en la parte superior del tanque, y sorpresivamente consigue colar una granada justo en el compartimento del conductor.

Las siguientes imágenes del vídeo revelan al tanque envuelto en llamas, no se sabe si con soldados dentro aún. El vídeo acaba con el tanque siendo completamente devorado por las llamas, provocando un pequeño incendio y explotando por el camino.

Y no hablamos de un tanque cualquiera. Estamos ante un carro de combate de 41,5 toneladas, que cuenta con un blindaje de 100 milímetros de acero y protección Kontakt. Monta, además, un cañón de ánima lisa 246M de 125 milímetros y un ametralladora PK5 de 7,62 milímetros. El uso de una granada para destruir un vehículo así sin duda supone una ventaja en combate.

No es la primera vez que vemos algo así. Un metraje publicado en diciembre del año pasado revelaba cómo un soldado ucraniano colaba de la misma forma una granada en el caño de un búnker donde se encontraban unos soldados rusos. No por nada los drones son una de las principales herramientas usadas en la invasión rusa, por parte de ambas potencias.

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