Las comunicaciones cifradas de aliens son las culpables de que nos pensemos que estamos solos en el universo, según Snowden.

Si aceptamos que el universo es infinito, como las últimas teorías apuntan, entonces la lógica nos dice que es seguro que exista una raza alienígena al menos tan inteligente como la nuestra.

Sin embargo, por mucho que hemos buscado no hemos encontrado ninguna prueba de que existan, ¿por qué? A este dilema se le conoce como la “paradoja de Fermi”, y cientos de científicos y aficionados han pensado en sus propias soluciones.

Las comunicaciones cifradas de aliens son indistinguibles del ruido cósmico

snowden degrasse tyson

Ahora Edward Snowden ha presentado su propia solución: no es que no recibamos comunicaciones alienígenas, es que no sabemos distinguirlas del ruido cósmico. Snowden es famoso por la gran filtración de información que reveló el espionaje de EEUU a ciudadanos de todo el mundo, y en la actualidad es muy solicitado. Recientemente participó en un podcast con el astrónomo y divulgador Neil deGrasse Tyson, donde explicó la idea que tenía sobre los extraterrestres.

La lógica de Snowden es que el cifrado de las comunicaciones es poco menos que inevitable para cualquier forma de vida inteligente; aunque puede haber un periodo de tiempo en el que la seguridad no sea una prioridad, tarde o temprano la sociedad se da cuenta de que es algo necesario (como está ocurriendo en la actualidad en la Tierra). Por lo tanto, podemos asumir que si ahí fuera hay una forma de vida más inteligente que la humanidad, todas sus comunicaciones estarán cifradas por defecto.

telescopio seti

Y una comunicación cifrada no se distingue de señales aleatorias. Así que cuando capturamos esas ondas, no somos capaces de distinguirlas del ruido cósmico, de las microondas que constantemente llegan a nuestro planeta procedentes de estrellas.

Esta teoría puede ser válida, pero tiene dos puntos en contra (como casi todas las teorías que intentan resolver la paradoja de Fermi). Para empezar, asume que los alienígenas no están buscando vida en otros planetas de manera activa, como está haciendo la humanidad, algo raro si son tan inteligentes. Segundo, es posible que exista una raza alienígena que no esté tan dividida como los humanos y no tenga la necesidad de cifrar sus conexiones porque tienen confianza mutua.