VIH

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Omicrono

Consiguen "cortar" el virus del VIH de células humanas

22 julio, 2014 11:38

El virus VIH sigue siendo uno de los desafíos mas duros para la comunidad científica, que está constantemente probando nuevos métodos para evitar la gran cantidad de muertes que provoca cada año. Por eso cada avance, por pequeño que sea, es digno de mención; puede que lo que haya conseguido el equipo de la Universidad de Temple no sea una cura milagrosa, pero si que es un paso importante que abre la puerta a posibles tratamientos. La idea en la que se han basado es bastante simple: como retrovirus, el VIH introduce su ARN en el ADN de las células del paciente. De esta manera es capaz de escapar a los antivirales, e incluso dar la falsa sensación de que el individuo está “curado”; en realidad siempre queda una “reserva” dentro de las propias células a la espera de que el tratamiento termine para volver a empezar el proceso.

Atacando al VIH en el interior de nuestras células

VIH-1

VIH-1

En realidad lo que ocurre es que las células que ahora cuentan con el ARN del virus en su material genético se dedican a replicar virus. ¿Cómo atacar entonces al virus, cuando a todos los efectos se trata de una célula de nuestro sistema? Los investigadores cogieron la misma idea que usaba su “enemigo”: modificar el ADN. Mas concretamente, desarrollaron su propia versión del ARN para “editar” el que había metido el virus; partieron de una tira de 20 nucleótidos que forma lo que se conoce como “ARN guía”. Esta pieza de ARN entra en la célula, detecta el ARN del virus que está en el genoma de la célula, y lo corta eliminando su influencia sobre el funcionamiento de la célula.

El equipo de investigadores ha conseguido tratar con éxito linfocitos T y otras células del sistema inmunitario humano, pero solo en laboratorio. De ahí a usar la misma técnica en seres humanos hay un gran trecho, ya que modificar el ADN del paciente siempre conlleva un gran riesgo. Si el ARN guía modificase cualquier otra parte del genoma podría provocar serias mutaciones, y debido a lo fácil que el propio VIH es capaz de mutar, es difícil estar seguro de dónde empieza su ARN y dónde termina dentro del ADN de la célula; una solución sería crear un tratamiento específico para cada paciente, pero eso supondría un aumento de costes y que esta no fuese la cura que todo el mundo está esperando. Aún así es muy pronto para sacar este tipo de conclusiones tanto en lo bueno como en lo malo.

Fuente | Eureka Alert | Motherboard