Ya os venimos avisando: a Facebook le hacía tilín la idea de forzar a sus usuarios a ver anuncios en vídeo, y después de un periodo de prueba en el que se han cambiado pocos detalles, ha llegado a todo el mundo. Este es solo un paso mas en este viaje de la red social para convertirse en la referencia en publicidad de Internet, y adelanta a gigantes del sector como Google que aún no se han atrevido a dar ese paso. Y cuando Google no se atreve con publicidad y tú si, es posible que te estés pasando.

Estos anuncios consisten en vídeos de unos quince segundos que se insertarán en nuestro feed y se reproducirán de manera automática en cuanto aparezcan en pantalla. Por lo menos hay que agradecer que no tendrán sonido por defecto, así que no tendremos que pasar por nuestro timeline con miedo por si de repente suena una explosión de efectos de sonido.

Con pies de plomo

Y es que Facebook es consciente de que si da un mal paso esta idea puede acabar en el retrete antes de que nos demos cuenta. Lo último que quiere es que los usuarios rechacen de pleno esta nueva función y que los anunciantes no se arriesguen a contratarla por miedo a antagonizarlos. Así que la compañía se ha asegurado de que estos anuncios tienen un cierto nivel y no molestan ni son considerados como “spam”, y por eso se ha hecho con los servicios de Ace Matrix, una compañía especializada que analizará los anuncios para ver si son lo suficientemente buenos antes de publicarlos.

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Es comprensible que Facebook haya tomado tantas previsiones teniendo en cuenta que este servicio costará a los anunciantes hasta dos millones de dólares al día. Una tarifa de vértigo pero que llegará mas allá que cualquier anuncio de televisión. Si todo esto servirá para que los usuarios acepten estos vídeos en sus feeds, es otra cuestión.

Fuente | Facebook