Estoy seguro que ninguno de los que leéis estas líneas habéis bajado nunca la descomunal cifra de 31 canciones por P2P, ya que es una auténtica barbaridad. Pues habéis hecho muy bien, porque un jurado de Massachussets está a punto de multar a un joven de 29 años con 540.000€ por descargar 31 canciones mediante P2P.

Todo empezó en 2003 cuando los padres del joven estudiante de 20 años Joel Tenenbaum recibieron una carta de la industria discográfica en la que se les informaba de que su hijo había descargado y distribuído de manera ilegal 31 canciones de las que no poseía los derechos de autor, y se le multaba por ello con 3.500$.

Entonces se intentó zanjar todo con un pago de 500$ por lo ocurrido, ya que el joven no disponía de más dinero por ser entonces estudiante. Sin embargo las discográficas decidieron utilizar este caso como cruzada contra la piratería y convertirlo en su bandera, intentando demostrar al mundo que quien bajase música por P2P tendría que vérselas con la justicia, y el asunto siguió en los tribunales.

La condena acabó ascendiendo hasta los 675.000$, pero Joel y sus abogados siguieron peleando, alargando muchos años la lucha en los tribunales. Tras varias apelaciones los recursos se están agotando, y ya parece muy difícil que se puedan librar de pagar una multa que actualmente ha subido desde los 3.500$ iniciales hasta los 675.000$ actuales, unos 540.000€.

Esta sanción no tiene nada que ver ni con el joven Joel ni con las 31 canciones que una vez descargó hace 9 años. Tiene que ver con crear miedo al usuario, que podría verse asustado al descargar contenido mediante P2P pensando que podría enfrentarse a multas tan desmesuradas como la que en este caso impone un pago de 22.500$ por cada canción.

¿Qué opinas sobre este caso? ¿Es justa la multa impuesta a Joel? ¿Se debería perseguir compartir contenido P2P siempre con esta fuerza?