El pasado 9 de julio, un hombre paseaba por la playa de O'ahu en Hawái cuando divisó un animal enterrado en la arena. Alertado por el estado del animal se acercó hasta el lugar y se quedó estupefacto cuando descubrió que era una perra viva, abrasada por el sol y con su piel "increíblemente inflamada".

Rápidamente, este hombre se puso en contacto con PAWS Hawaii, una ONG que se dedica a rescatar animales. Esta organización no dudó en hacerse cargo de la perra para proceder hacerle las curas pertinentes al animal, que había sido apaleado por su dueño antes de sepultarla bajo la tierra.

Leialoha, nombre de la moscota, ha tenido que ser atendida por la grave deshidratación y sus problemas de piel, ya que había perdido el 90 por ciento de su pelaje. Los veterinarios descubrieron que su dueño también le había propinado diversos cortes en sus patas delanteras.

"Se nos rompió el corazón”

A día de hoy, Leialoha ha respondido bien a los tratamientos y se recupera favorablemente. Además, las buenas noticias no acaban aquí: hace unos días una mujer llamada Amanda conoció el caso a través de las redes sociales y decidió adoptar a la perra:"Estábamos viendo Facebook cuando nos enteramos de la historia de esta perra. Se nos rompió el corazón”. 

Amanda, que ya colabora con PAWS Hawaii, asegura que lo peor ya ha pasado. No obstante, la perra todavía se encuentra un tanto inflamada y enrojecida pero se muestra más animada.  

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