La salud mental es una de las cosas que más preocupa a la población española, según el estudio Global Health Service Monitor 2022. Una evidencia de que cada vez nos preocupamos más por nuestras emociones, por aquello que sentimos y por nuestros pensamientos. Pero aún así, hay determinados trastornos que en los últimos años han experimentado un aumento sobre todo entre las mujeres y, no nos referimos solo al conocido síndrome de la impostora o al de 'superwoman', sino también al conocido como síndrome del patito feo.
Un síndrome directamente relacionado con la inseguridad y la baja autoestima, que lamentablemente está muy ligado a los cánones de belleza tradicionalmente impuestos y los conocidos estereotipos de género establecidos en la sociedad actual. Un factor que se ha incrementado en los últimos años y sobre todo debido a herramientas como Instagram, en las que constantemente se muestran esos ideales de belleza a menudo irreales. Te contamos todo sobre el síndrome del patito feo y cómo hacerle frente.
Qué es el síndrome del patito feo
El síndrome del patito feo, también conocido como trastorno dismórfico corporal, se refiere a la preocupación excesiva que tiene la persona que lo sufre por algún "defecto" que percibe en sí misma. Un "defecto" que puede ser imaginado o que puede llegar a no ser tan grave o notorio como considera la persona.
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¿Esto quiere decir que todas las personas que no estén contentas con alguna parte de su cuerpo o que quieran cambiar algo lo padecen? La respuesta es no, ya que para identificar la presencia de este síndrome, las personas tienen que tener también otras características.
Entre ellas encontramos una preocupación excesiva por el defecto físico, hasta el punto de que llega a deteriorar diferentes aspectos de la vida de la persona, por ejemplo en su área social, laboral, afectiva, escolar, etc.
El síndrome del patito feo se considera por lo tanto un problema, cuando este interfiere de alguna manera en la vida de la persona con algún tipo de conducta extremista para dar solución a ese "defecto", intentando minimizarlo o eliminarlo. En algunos casos graves, algunas personas con este síndrome han llegado incluso a poner en riesgo su vida para poder camuflarlo.
Un síndrome por lo tanto de percepción limitante, que distorsiona la imagen física de quien lo padece y le aísla del entorno, afectando a la percepción que tenemos de nosotras frente al espejo y construyendo una imagen irreal que potencia aquellos rasgos que nos generan inseguridad.
Cómo saber si padeces el síndrome del patito feo
Bajo cualquier sospecha de que alguien de tu entorno o incluso tú misma podáis estar bajo este síndrome, lo mejor es siempre acudir a un profesional especializado que pueda ayudarte a identificar si sufres el síndrome del patito feo y pueda darte las mejores herramientas y consejos para superarlo.
Aún así, existen unas características comunes entre las personas que lo padecen y que vamos a detallarte a continuación:
- Tienes la sensación de querer ser invisible y pasar desapercibida es tu misión diaria.
- Envidias el físico de otras personas y te comparas para ver en qué son mejores.
- Tratas de cumplir con los estereotipos de modelos, famosas o personas socialmente consideradas atractivas.
- No te sientes atractiva por esos supuestos "defectos" físicos.
- Actitud negativa.
- Incredulidad ante los elogios de otras personas.
¿Por qué es más común el síndrome del patito feo en mujeres?
La proliferación de este síndrome entre el género femenino tiene mucho que ver con la publicidad, las redes sociales y los altos estándares de belleza que desde hace años vienen estableciéndose en la sociedad y los medios.
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Todos estos estándares y estereotipos de género suelen generar más complejos en las mujeres sobre todo en la etapa de la adolescencia, siendo menos frecuentes durante la adultez, aunque igualmente pueden aparecer en cualquier etapa y lamentablemente cada vez se dan a edades más tempranas.
Más allá de estos complejos, lo que más preocupa al respecto es la gestión que podamos llegar a hacer de ellos y que puede hacer que los veamos como algo preocupante o al contrario, totalmente insignificante.
Precisamente por ello, es importante que contemos siempre en estos casos con la ayuda de un profesional y que seamos conscientes que esa belleza ideal y a menudo irreal que vemos en redes sociales a cualquier hora del día, no debe influenciarnos en exceso y menos hasta el punto de que repercuta negativamente en nuestro bienestar.
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Y es que a menudo este tipo de complejos pueden ir acompañados de otros trastornos alimenticios graves, vigorexia, obsesiones, depresión y ansiedad. De ahí que sea crucial llevar un control sobre esa gestión emocional y sobre cómo llegan a influir en nosotros este tipo de medios y pantallas.
Cómo superar el síndrome del patito feo y ver el cisne que eres
Como ya te hemos adelantado, buscar la ayuda de un profesional especializado siempre será la mejor forma de dejar atrás este síndrome, pero existen algunas pautas que también podrán ayudarte a reducir esa ansiedad.
- Trabaja en palabras de afirmación que refuercen tus virtudes más evidentes.
- Trata de no comparar tu físico con lo que ves en redes sociales como Instagram o revistas y que a menudo se aleja de una belleza real.
- Trabaja en encontrar un estilo personal con el que puedas sentirte cómoda sin seguir estándares impuestos.
- Dedícate tiempo a ti. Entre el trabajo, los estudios y las tareas cotidianas, a veces es difícil buscar tiempo para una misma. Pero te animamos a que lo hagas sin obsesionarte y a que incorpores hábitos saludables como el ejercicio físico o una alimentación equilibrada y completa que puedan ayudarte a ganar en salud física y energía.