Por qué la Semana de la Moda de Copenhague debería estar en tu radar si quieres ir a la última

La Semana de la Moda de Copenhague no era, hasta hace un lustro, tan conocida como sus alter ego de París, Milán, Londres o Nueva York pero, pasito a pasito, se ha ido haciendo un hueco, con la sostenibilidad por bandera y un street style que se ha hecho tan famoso que ya tiene nombre propio, Copencore.

[Copencore: el estilo de moda danés del que todo el mundo habla]

La primera edición de la Copenhaguen Fashion Week se celebró en 2006. No incluía en su calendario marcas míticas ni históricas sino jóvenes diseñadores con el apoyo del Danish Fashion Institute (DFI), que luego organizaría también, en 2009, la primera Cumbre de la Moda de Copenhague. 

Casi dos décadas después, la pasarela danesa no solo ha logrado aglutinar todo el diseño escandinavo (que incluye el talento danés pero también el de Suecia y Noruega), sino también liderar el camino de la moda sostenible. Y, por supuesto, marcar la pauta del street stye, desbancando incluso al francés.

En ello ha tenido arte y parte Cecilie Thorsmark, la gran dama de la moda sostenible. Aunque fue nombrada CEO de la Copenhaguen Fashion Week (CPHFW) en 2018, para entonces llevaba una década trabajando para el Instituto Danés de la Moda y la Cumbre de la Moda.

En una entrevista que le hizo Charo Izquierdo para magasIN, Cecilie Thorsmark explicaba el ambicioso plan de acción en el que han estado trabajando los últimos tres años: la implementación de dieciocho requisitos mínimos para las marcas que desean ser parte de la Semana de la Moda de Copenhague.

Si nos los cumplen, no se les permite participar, ni en los desfiles ni como expositor. Y su intención es que, además de en enero/febrero y agosto (cuando se celebran las dos ediciones de la Semana de la Moda de Copenhague) durante los meses restantes se realicen acciones para seguir empujando a la industria hacia la sostenibilidad.

Entre las marcas que desfilarán por la pasarela danesa se encuentran algunas ya conocidas como Baum und Pferdgarten, Ganni, (Di)visión, Rotate, Skall Studio, Stine Goya, TG Botanical o The Garment.

Sin olvidarnos de otras como A. Roege Hove, Aeron, Alpha, Gestuz, Helmstedt, Henrik Vibskov, Holzweiler, Iso.Poetism by Tobias Birk Nielsen, Latimmier, Lovechild 1979, Mark Kenly Domino Tan, Munthe, OpéraSport, P.L.N., Rabens Saloner, Remain, Saks Potts, Selam Fessahaye, Soulland, Stamm y Wood Wood.

Todos ellos cumplen con los estándares mínimos que exige la CPHFW y cubren toda la cadena de valor de la moda, aunque en relación a esos estándares hay empresas o diseñadores que están más avanzados que otros en algunas áreas. Y es una organización externa la que evalúa si cumplen o no esos dieciocho puntos.

Es un proyecto muy difícil y muy ambicioso, que nunca se acaba y que, como la propia Cecilie Thorsmark reconoce, requeriría un cambio de mentalidad tanto en la industria como en el consumidor pues el problema de la moda hoy es de volumen, de sobreproducción y de sobreconsumo.

Para dar ejemplo desde la propia organización, su Plan de Acción de Sostenibilidad 2020-2022, establecía el objetivo de reducir el consumo de recursos y la generación de desechos, para convertirse en una Semana de la Moda sin desperdicios en 2022.

Además, asesoran a las marcas en todo aquello que puedan necesitar en ese camino a la circularidad: desde cómo encontrar una segunda vida para sus prototipos y usar solo envases reciclados, hasta opciones comerciales más estratégicas, como ofrecer servicios de reventa, alquiler y uso compartido a sus clientes.

Estos son los dieciocho requisitos que las marcas que deseen participar en CPHFW deben cumplir:

Estrategia

1- Incorporación de la sostenibilidad y los estándares internacionales en materia de derechos humanos.

2- Inclusión de la diversidad y la igualdad en el enfoque de gestión empresarial y compromiso activo de contemplar estos aspectos en la contratación de personal, especialmente cuando se trate de puestos directivos.

3- Compromiso de no destruir los invendidos de colecciones anteriores.

Diseño

4- Diseños que trabajen para mejorar la calidad y el valor de los productos e información a sus clientes sobre el valor de la longevidad de las prendas.

5- Asegurar una segunda vida para los prototipos que se muestran en los desfiles y eventos.

Materiales y tejidos

6- Al menos el cincuenta por ciento de la colección debe tener certificación de estar realizada con materiales que no dañan al medio ambiente, sostenibles de nueva generación o reciclados, o procedentes de prendas invendidas.

7- Utilizar una lista de tejidos que no dañan el medio ambiente.

8- Utilizar una lista de sustancias restringidas, siguiendo los requisitos de la Directiva REACH de la UE y garantizar el cumplimiento de los mismos por parte de sus proveedores.

9- No utilizar pieles en las colecciones.

Condiciones de trabajo

10- Compromiso de ejercer las investigaciones necesarias en toda la cadena de suministro de acuerdo con las pautas y estándares internacionales, trabajando con sus proveedores para garantizar, por ejemplo, un empleo elegido libremente, un empleo seguro o la ausencia de trabajo infantil.

11- Compromiso de trabajar en un ambiente de trabajo seguro, saludable y respetuoso para todos sus empleados, libre de acoso y discriminación y donde todos disfruten de las mismas oportunidades independientemente de su género, etnia, edad, orientación política/religiosa/sexual, apariencia física y capacidad.

Consumo

12- Contar con personal de servicio al cliente en la tienda física y online, bien informado sobre la estrategia de sostenibilidad de la empresa.

13- Educación e información a los clientes sobre sus prácticas de sostenibilidad en múltiples plataformas.

Desfiles

14- No utilización de envases de plástico de un solo uso en la tienda o para pedidos on line, ofreciendo alternativas reciclables, recicladas o reutilizables.

15- Diseño de escenarios y producción de desfile con cero desperdicio.

16- No utilización de envases de plástico de un solo uso en backstage durante la semana de la moda, con alternativas reciclables, recicladas o reutilizables.

17- Compensación o eliminación de la huella de carbono del desfile.

18- Haber firmado la Carta Ética de la Moda Danesa y consideración de la diversidad y la inclusión en el casting de modelos.

Lo interesante es que, ahora, el resto de las Semanas de la Moda, se suban al mismo carro e implementen medidas similares a la de Copenhague. Por el momento, ya han logrado que los ojos de los expertos en moda de todo el mundo se fijen en la pasarela danesa.

Quién sabe si pronto la Semana de la Moda de Copenhague será otro de los atractivos turísticos de la capital y tan conocida como el restaurante Noma, la escultura de la Sirenita o los cuentos de Hans Christian Andersen.