El acceso a la vivienda en España podría seguir enfrentando tensiones importantes en 2026, impulsadas por la combinación de precios elevados, oferta insuficiente y un mercado del alquiler cada vez más tensionado. A pesar de los esfuerzos normativos y de los planes de construcción de vivienda pública, la demanda continúa superando con creces la disponabilidad.
En consecuencia, Edu Saz, arquitecto y creador de contenido, se propone responder una serie de cuestiones sobre la situación de la vivienda en España en 2026, entre ellas, la siguiente: ¿Por qué no se regula el precio de la vivienda alquilada en Europa?
Su respuesta es la siguiente: "La gente piensa que la solución normalmente es regular más, pero la vivienda ya está hiperregulada y ese es su principal problema. Las licencias son lentísimas, cargas fiscales muy altas y los trámites en general son entornos para cualquier obra que quieras hacer".
Respondo SIN FILTROS sobre VIVIENDA en España 2026
Continua explicando que todo eso hace que "construir y sacar pisos al mercado sea carísimo y muy lento". Igualmente indica que: "Al mirar ciudades donde se ha limitado los precios del alquiler, como por ejemplo Berlín, el patrón es siempre el mismo: baja la oferta, suben las listas de espera y aparece automáticamente un mercado negro."
"Si se le dice a un propietario cuánto puede cobrar por una vivienda que ha comprado en el mercado libre, pero no se le quitan los riesgos ni se le da seguridad jurídica, este se va a otro tipo de alquiler o saca el piso del mercado. El resultado es menos oferta y más competencia entre inquilinos, lo que sube los precios fuera del tramo regulado".
En consecuencia, Edu Saz explica lo siguiente: "Lo que se busca para que el precio baje es exactamente lo contrario: más competencia entre pisos. Por eso, la solución no es congelar los precios, sino aumentar la oferta y facilitar que más gente quiera poner pisos en alquiler
Igualmente explica que, por ahora, en un corto o medio plazo, "no ve que los precios vayan a bajar al menos en grandes capitales a no ser que venga algún elemento disruptivo que no tenga nada que ver con el sector inmobiliario."
En consecuencia, más allá de lo que explica este arquitecto, se puede apreciar que España se encamina hacia un 2026 marcado por desafíos estructurales debido a la falta de vivienda asequible, aumento de la desigualdad residencial, brecha territorial entre zonas urbanas y rurales y una necesidad urgente de modernizar el parque inmobiliario para cumplir con los objetivos climáticos europeos.
