¿Cómo actuar después de la depilación láser? Tips para mimar tu piel y hacer que se vea radiante

Las tecnologías de depilación láser evolucionan con el tiempo, y, con ellas, aparecen nuevos procedimientos que nos ayudan a eliminar el vello de forma eficaz y sin apenas dolor. Pero aunque nosotras no siempre lo notemos, nuestra piel queda expuesta, durante las sesiones, a posibles irritaciones que debemos compensar con los debidos cuidados después del tratamiento. 

La piel después de depilarse

Al salir de una sesión de depilación láser, es normal que notemos enrojecimiento e incluso una leve inflamación en la zona tratada, sobre todo si tenemos piel sensible. No hay de qué preocuparse: estos efectos desaparecerán en las siguientes 24 horas, pero lo ideal es que mientras tanto cuidemos nuestra piel para evitar molestias.

No podemos olvidar que, al fin y al cabo, esta técnica funciona a partir de una luz pulsada que puede afectar a nuestra dermis y a la melanina de la piel. Si el pelo es muy grueso, pueden incluso formarse unos pequeños puntitos rojos llamados edemas perifoliculares. 

A lo largo de los días posteriores a la depilación, la piel irá expulsando el vello inerte de los folículos, aunque este proceso puede alargarse por hasta dos semanas. En este caso, está permitido que nos rasuremos entre sesión y sesión, pero no podremos arrancar el pelo de la raíz. 

El láser es una de las opciones de depilación más demandadas con la llegada del verano. iStock

Recomendaciones post-láser

1. Hidratación, ante todo

La piel está muy sensible después de la depilación láser, y es importante que la cuidemos e hidratemos regularmente. ¿Nuestro mejor aliado? Las cremas a base de aloe vera, que debemos aplicar de forma abundante 2-3 días antes y después del tratamiento para aprovechar al máximo sus propiedades regeneradoras y astringentes. 

Si aplicamos aloe vera entre las sesiones, nos aseguraremos de que nuestra piel llega completamente sana y restaurada a la próxima cita con el láser. También podemos aplicar hielo envuelto en un paño para calmar temporalmente las molestias. 

2. Deja que tu piel respire

Los expertos recomiendan que, después de depilarte, te pases por unos días a las prendas holgadas para que estas no hagan fricción con tu cuerpo. Si las zonas tratadas están en el rostro, evita utilizar maquillaje justo después de la sesión, y también prescinde de autobronceadores y otros productos que puedan impregnarse en la piel. 

3. Higiene y agua tibia

Tras las sesiones de láser, los poros quedan abiertos y es fundamental que aumentes la limpieza de la piel. Utiliza jabón neutro y exfolia 1 o 2 veces por semana para ir regenerando la piel y fomentar la caída del vello. 

Aunque es preferible mantener la zona lo más seca posible, sabemos que eso no siempre es fácil de cumplir. En cualquier caso, evita tomar duchas con agua muy caliente durante los primeros tres días, y no apliques calor directo. 

4. Cuidado con las cremas

Sí, es bueno que emplees cremas y lociones para mantener tu piel suave e hidratada. Pero no cualquiera sirve. Asegúrate de que estos productos no contienen alcohol ni parabenos en su fórmula. Y esto también aplica con el desodorante: es mejor que lo dejes apartado al menos durante las primeras 24 horas después del tratamiento. 

5. No olvides la protección solar

Aunque las técnicas láser han ido perfeccionándose y muchas ya nos permiten disfrutar del sol con nuestros mejores bañadores, lo cierto es que deberías esperar entre 3 y 4 días antes y después de las sesiones para poder exponerte a los rayos UV. 

Igualmente, es imprescindible que apliques protectores solares en las zonas depiladas durante todo el tiempo que dure tu tratamiento (y si es en el rostro, ya sabes que lo ideal es que los uses siempre).

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Con estas recomendaciones y algo de paciencia hasta que tu piel esté completamente libre de vello, ya no hay nada que te impida disfrutar de los beneficios de la depilación láser en cualquier época del año.