El sector del automóvil lo lleva advirtiendo desde hace varias semanas. Y, por el momento, no hay una respuesta por parte de los gobernantes.

Hablamos de los precios de los coches que, si nada ni nadie lo impide en los tres meses que quedan de aquí a final de año, serán más elevados.

Un incremento de precio que según los cálculos realizados por El Español se situarían entre los 400 euros adicionales de los coches más económicos, si bien la gran mayoría de los modelos que se suelen comercializar rondarán los 800 o 1.000 euros de sobreprecio.

El motivo de esta subida en los precios de los coches viene determinada por la entrada en vigor de la normativa WLTP. Esta ley fue aprobada hace años, sin embargo, en España se concedió una moratoria para que no entrara en vigor hasta el 1 de enero de 2021.

La nueva normativa WLTP lo que hace es que mide los consumos de los coches nuevos con unos mecanismos más similares a la conducción real del día a día.

De esta manera, el WLTP lo que pretende es acabar con el sistema anterior, conocido como NEDC, que era demasiado ‘benévolo ’ con los consumos.

Así, al pasar del NEDC al WLTP lo que ocurre ahora es que los consumos de los coches suben. Y al subir los consumos, también suben las emisiones.

Y aquí es donde está el ‘quid’ de la cuestión. Como también suben las emisiones, muchos de los coches que hasta ahora se mantenían por debajo de los 120 gramos (y por lo tanto no pagaban impuestos) ahora superarán esta cifra y les tocará, como mínimo, pagar un 4,75% más.

Recordamos en este sentido que los tramos del impuesto de matriculación, que están traspasados a las comunidades autónomas, son:

• 0%: Emisiones hasta 120 gramos de CO2
• 4,75%: Entre 120 y 160 gramos de CO2
• 9,75%: Entre 160 y 200 gramos de CO2
• 14,75%: Máss de 200 gramos

Analizando, por ejemplo, los precios de algunos de los coches más vendidos en España. Este análisis que se recoge en la siguiente tabla es una aproximación.

Para ello, hemos seleccionado el PVP de estos modelos y hemos sumado el 4,75% del impuesto de matriculación del primer tramo a algunas de las versiones que a día de hoy tienen un 0% de impuesto de matriculación. Y esto es lo que nos ha determinado que la media se encuentra entre los 400 y los 1.000 euros.

Un 4% de incremento de media

Según la empresa especializada en el renting de vehículos Arval, la aplicación de la normativa WLTP para la medición de los ciclos de consumo de los vehículos tendrá un efecto "importante" en el mercado.

En concreto, Arval habla de que el coste total (TCO) de los vehículos nuevos se incrementará un 4% de media por la aplicación de la normativa WLTP, que será la única norma de homologación de consumos de los automóviles a partir del 1 de enero de 2021.

En primer lugar, aumentarán las cifras homologadas de consumos y emisiones, puesto que la nueva legislación es más estricta. Esto tendrá un impacto directo en el impuesto de matriculación, lo que se traducirá en un incremento medio de un 4% en el coste total de los vehículos y en un aumento de la cuota mensual del renting.

Todo ello debido a que las cifras homologadas de emisiones medias de dióxido de carbono (CO2) de los automóviles de diésel y de gasolina sufrirán un "significativo" aumento, con más incidencia entre los primeros. Este incremento es de hasta un 36% en los diésel en el periodo 2018-2021 y de hasta un 30% en los de gasolina.

Por ello, tendrá un impacto directo en el impuesto de matriculación. Muchos vehículos que estaban exentos de su pago, al estar por debajo de las cifras exigidas de emisiones, ahora estarán obligados a pagarlo.

El 93% de los coches pagará impuesto de matriculación

"Solo el 7% de los vehículos continuarán disfrutando de la exención del pago de ese impuesto, cifra que actualmente asciende al 36%. Y muchos otros coches que ya lo pagaban, saltarán de tramo impositivo con las nuevas cifras", explica Arval.

Por ejemplo, en el segmento de los coches pequeños, el 77% de los vehículos matriculados en 2020 está exento del pago bajo la normativa NEDC-C, cifra que, en 2021 con el WLTP, se reduciría al 15%. De esta forma, del 22% de este segmento que pagaba el primer tramo (con una tasa del 4,75%), se pasaría al 74%. Y del 1% del segundo tramo (tasa del 9,75%), subirá al 10%.