Con la llegada del verano, los centros de salud y consultorios de la provincia modifican su horario de atención a los pacientes. De esta manera, en Málaga se mantendrán abiertos en horario de tarde 25 centros de salud.
A estos 25 consultorios hay que sumar los 45 Servicios de Urgencias de Atención Primaria (SUAP) existentes frente a los 37 de 2018 que funcionarán en su horario habitual y que incluye las tardes.
De esta manera, serán 70 los puntos de asistencia sanitaria de tarde que habrá en Atención Primaria desde este mes de junio hasta el próximo octubre cuando el Plan Verano 2025 del Servicio Andaluz de Salud termine y vuelva el horario habitual.
Esta medida no es nueva y desde la Junta de Andalucía inciden en que, pese al cierre de algunos centros de salud por las tardes, queda asegurada con “calidad y eficiencia” la atención sanitaria de malagueños y visitantes, con especial incidencia en el distrito Costa del Sol por el incremento de visitantes en estas fechas.
En cuanto al horario, todos los centros de salud y consultorios permanecerán abiertos de 8 a 15 horas, salvo los que tengan horario de tarde. Todo ello para dar prioridad a las urgencias, asegurando una atención sanitaria de calidad a quienes la necesiten y respetando los periodos vacacionales de los profesionales.
En las zonas de mayor afluencia turística, además, se constituyen comisiones de seguimiento locales en los centros, lideradas por los equipos directivos, y diariamente evaluarán la situación para redistribuir los recursos.
Así, durante todo el verano, en la Costa del Sol, que es uno de los puntos con más afluencia turística, permanecerán abiertos de 8.00 horas a 20.00 horas los centros de salud de San Miguel (Torremolinos), Arroyo de la Miel (Benalmádena), Las Lagunas (Mijas), Las Albarizas, Leganitos y San Pedro Alcántara en Marbella, además de los 6 puntos de urgencias 24 horas ubicados en Torremolinos, Benalmádena, Fuengirola- Mijas, Marbella, San Pedro y Estepona.
Cabe recordar que hace unos días, desde el Sindicato de Enfermería (Satse) criticaron esta medida y aseguraron que era “injustificada” porque "provocará una sobresaturación de los servicios de urgencias, que se verán obligados a absorber la demanda asistencial que no podrá atenderse en los centros cerrados".