Las claves
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La Lotería de Navidad sigue dejando historias cargadas de emoción en Málaga capital. Tras dos quintos premios repartidos en el centro comercial Plaza Mayor y en Vialia, se suma ahora el segundo de los cuartos premios, que ha llevado la fortuna a la calle Camino Suárez, en el distrito de Bailén-Miraflores.
El número 25.508, agraciado con el cuarto premio, ha repartido 8 millones de euros en la ciudad tras venderse 40 series completas en la Administración de Loterías Costa del Sol, situada en el número 30 de la calle Camino de Suárez. Cada serie está dotada con 200.000 euros, lo que supone 20.000 euros por décimo.
Entre las historias que deja este premio destaca la de Irene Pastor, trabajadora de la administración desde hace apenas tres semanas, que no solo ha sido testigo directo del premio, sino también protagonista de una de las anécdotas más emotivas.
"Este sábado, el anterior al sorteo, vino mi novio a traerme al trabajo y le dije: vamos a regalarle un número a la casera, que le hace falta”, ha explicado Irene, que se acaba de independizar a sus 29 años y ha comenzado a trabajar en esta administración malagueña. "La mujer se ha portado muy bien con nosotros durante este tiempo y queríamos regalarle algo", ha explicado esta mañana, tras conocer el premio. "Estoy muy contenta".
La confirmación del premio llegó de la forma más emocionante posible. “La casera me ha llamado llorando diciendo que le había tocado. Me decía: me has traído la suerte, me has traído la suerte”, ha comentado Irene ante los periodistas, aún emocionada. "Con este achuchoncito me conformo, me viene muy bien y a la casera también, que son una familia humilde y no lo están pasando bien".
La suerte ha querido que Irene viva este momento desde dentro del mostrador. “Llevo solo tres semanas trabajando aquí y me ha tocado. Le he traído la suerte a la administración y a la casera”, ha bromeado.
La Administración de Loterías Costa del Sol está regentada por José Carlos y Pepi, al frente del negocio desde 2017, quienes celebran que la fortuna haya vuelto a sonreír al barrio.
