La Empresa Malagueña de Transportes (EMT) ha descartado finalmente ir adelante con la construcción de un edificio icónico para su nueva sede institucional. Este inmueble iba a formar parte del proyecto de cocheras planteado en la calle Paquiro y que vienen a sustituir a las históricas instalaciones de Camino de San Rafael.
La pretensión de los técnicos de la Gerencia de Urbanismo que dieron forma al diseño era incrementar de manera clara la superficie reservada para el estacionamiento de vehículos, al tiempo que modernizar las dependencias, apostando, además, por una sede de diseño arquitectónico.
Ese aspecto se pone de manifiesto al ver los primeros diseños del complejo. En concreto, el complejo iba a constar de dos cuerpos de 3 plantas cada uno, que iban a estar conectados entre sí a través de la planta primera, salvando el embovedamiento de la vaguada existente en el interior de la parcela.
Otra imagen del nuevo edificio proyectado para la EMT de Málaga.
Este inmueble iba a formar parte del proyecto global de las nuevas cocheras, planificadas en la calle Paquiro.
Muestra del valor que se daba desde Urbanismo a este elemento es que se ponía el acento en que iba a ser el edificio de oficinas "el que generase la imagen pública hacia la ciudad, siendo el propio edificio el que hace de soporte y de conexión entre la campa de los autobuses y la calle Paquiro".
Según se precisaba en los documentos técnicos conocidos, el cuerpo de la zona Este albergaría un uso más vinculado a los trabajadores de la empresa, mientras que el del Oeste tendrá un carácter más institucional, albergando el uso de oficinas.
"Se trata de dar una imagen urbana y de calidad mediante unos cuerpos que se proyectan hacia la calle y la campa imprimiendo carácter a la propuesta, dejando una serie de terrazas que permiten el disfrute del espacio exterior desde el interior del edificio", se precisaba.
Atendiendo a los datos conocidos, la superficie construida iba a ser de 13.000 metros cuadrados.
