Málaga

El Ayuntamiento de Málaga cambia radicalmente de estrategia para potenciar el uso de la bicicleta en la ciudad. Ante el fracaso del sistema de bicis de alquiler que desde 2012 ha venido operando en la capital de la Costa del Sol, con apenas 2.000 usuarios en la actualidad (llegó a tener 50.000), el equipo de gobierno va a aprovechar la finalización del acuerdo de concesión con la empresa JCDecaux para desarrollar un nuevo sistema.

El mismo es semejante al que ya se viene empleando con los patinetes eléctricos. Es decir, otorgará autorizaciones a diferentes compañías interesadas en contar con una flota de bicis "de última tecnología" y que serán de pedaleo asistido. La previsión es que el máximo de vehículos sea de 600. Una de las particularidades es que estos dispositivos podrán ser estacionadas en los mismos puntos ya habilitados para los patinetes, aunque se pretende ampliar los emplazamientos.

Este mecanismo empieza a funcionar el próximo lunes, según ha confirmado el concejal de Movilidad, José del Río. El edil da por hecho que ese mismo día ya habrá vehículos disponibles para el uso de los usuarios, señalando que ya hay varias de las empresas que han pedido permiso para distribuir sus patinetes que quieren contar también con el aval necesario para tener bicis en funcionamiento.

En la misma medida en que ocurre con los patinetes, en el caso de las bicis se utilizará una app para realizar el trámite de alta, ver al instante dónde se localiza la bicicleta más próxima y pagar en función del tiempo de uso.

De acuerdo con los detalles facilitados por el equipo de gobierno, la actual concesionaria del sistema de bicis, cuyo contrato expira el mismo lunes, desmontará progresivamente las estaciones de anclaje repartidas en la ciudad y pondrá a disposición del Consistorio las 285 bicis que se encuentran en buen estado.

Por otro lado, Del Río, tal y como avanzó días atrás EL ESPAÑOL de Málaga, ha confirmado que hay diez empresas interesadas en contar con autorización para patinetes eléctricos. Todas ellas tienen derecho, según la normativa municipal, a disponer de un máximo de 300 vehículos. 

Sin embargo, el concejal ha apuntado la posibilidad de reducir esta cifra a 150 por cada una de las firmas en el supuesto de que todas ellas cumplan con los requisitos exigidos para operar en la ciudad el año que viene. Y ha vuelto a apuntar la posibilidad de que el año que viene se active un concurso mediante el que otorgar la concesión de estos medios de movilidad alternativa a una o dos firmas, reduciendo de este modo su impacto en la ciudad.

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