El olor a incienso ya empieza a inundar Málaga y no solo sus calles y barrios sino también sus colegios y hospitales. Los cofrades van saliendo poco a poco a la calle para disfrutar de los traslados, las procesiones de barrio y los vía crucis… empezando a vivir una nueva semana grande que está a la vuelta de la esquina.

Entre los que han tenido la oportunidad de celebrar la Semana Santa antes de que llegue el Domingo de Ramos han sido los usuarios, familiares y trabajadores del centro asistencial San Juan de Dios que, con la intención de acercar esta celebración a todos los que rodean este centro.

Por ello han celebrado en este último martes de Pascua una procesión conformada por más de 200 personas en las que han sido protagonistas el Cristo de la Misericordia y la Virgen de la Paz. A media mañana se escucharon los primeros tambores y cornetas avisando de que el Tercio Alejandro Farnesio IV de la Legión Española ya había llegado y la procesión iba a comenzar.

El cortejo, compuesto por nazarenos y mantillas, iba encabezado por un grupo de usuarios portando una cruz y partió de la iglesia de Jesús de la Misericordia y San Juan de Dios, ubicada en el interior del centro. Poco a poco, los trabajadores y voluntarios iban formando la procesión, hasta que ambas imágenes estaban en la calle dispuestos a recorrer todo el centro.

El sol no ha sido lo único que ha iluminado a los asistentes a esta procesión, también lo ha hecho la posibilidad de formar parte de la Semana Santa de Málaga. Los residentes del centro y usuarios de la Asociación Nena Paine admiraban con emoción y entusiasmo cómo por tercer año consecutivo podían disfrutar de la semana grande de la ciudad en primera persona sin tener que ver las procesiones a través del televisor.

En este punto, Sara Montemayor Trujillo, monitora en el Centro Asistencial San Juan de Dios y una de las organizadoras de la procesión, asegura a EL ESPAÑOL de Málaga que esta actividad la llevan organizando tres años y es “un día muy bonito”. Además, añade que esto se debe porque “es un día para los usuarios que no pueden ir a ver procesiones”, ya que muchos de los residentes de San Juan de Dios durante la Semana Santa no salen a la calle a ver tronos.

Para los usuarios este es uno de los días más especiales del año. “La mayoría no puede ver la Semana Santa y esto es traerle la Semana Santa a su casa, a su hogar, donde ellos viven”. Además, ellos también forman parte del cortejo, tanto durante la procesión como su organización que comenzó el pasado mes de enero.

De ahí que a ella y un compañero más les surgiera esta idea. “Durante muchos años la virgen ha estado en un almacén guardada. Un día la vimos, la sacamos y con el equipo de mantenimiento hicimos un trono para una procesión que era solo para geriatría”, explica la profesional.

Al final, ese año, de manera improvisada, terminaron abriendo las puertas y recorriendo todo el centro. Por lo que al año siguiente dieron un paso más y contactaron con la Legión Española que desde el año pasado acude al centro unos días antes de la Semana Santa para acompañar al Cristo de la Misericordia y a la Virgen de la Paz.

Y es que lo que comenzó como una actividad pequeña solo para usuarios de una unidad, ahora es algo que ha traspasado los muros, puesto que en la organización de esta procesión también han participado el florista y vestidor Álvaro Olea y Pedro Gómez, la Cofradía de la Estrella, que ha cedido bastones, a Alba Mezcua, Paloma Terrón, Javier Lozano y Sara Montemayor, que han donado un broche, un rosario y los martillos para procesional.

Además, pese a que una gran parte de los residentes del centro han formado parte del público, también han dejado su granito de arena en toda la organización. Los usuarios de la Unidad de Psicogeriatría han elaborado estampas de los Sagrados Titulares para regalar a los asistentes a la procesión, así como medallas para los usuarios, familiares y trabajadores.

Los Sagrados Titulares

El Cristo de la Misericordia es un crucificado que habitualmente se puede visitar en la residencia de San Juan de Dios de Antequera y ha sido portado sobre el trono cedido por la Parroquia de la Sagrada Familia de la capital malagueña por profesionales del centro asistencial y por hombres de trono de La Quilla, del submarino de la Virgen del Gran Poder. Le ha acompañado la banda de guerra del tercio Alejandro Farnesio IV de la Legión Española y grupo de Caballería.

En la sección de la Virgen de la Paz también han ido nazarenos del centro asistencial vestidos con túnicas moradas cedidas por la Cofradía de Nueva Esperanza, que también ha donado los cirios, y que ha ido acompañada por Hermanos de la Orden hospitalaria, miembros del equipo directivo, y una representación de la junta de Gobierno de la cofradía de la Misericordia -institución vinculada a la Orden-, durante todo el cortejo procesional. La Virgen de la Paz ha sido llevada por profesionales del centro sanitario y familiares sobre el trono de ensayo de la hermandad de Salutación y María Santísima del Patrocinio Reina de los Cielos.