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El mar Mediterráneo vuelve a ser el telón de fondo de la música en directo en Málaga. El Brisa Festival arrancó este jueves por segundo año consecutivo en el Dique de Levante, en una tarde que nadie se quiso perder y que estuvo repleta de sorpresas.

A las 19.30 horas comenzó la música que se llegó a escuchar en diferentes puntos de la capital. Sanguijuelas del Guadiana se subió al escenario y cantaron “las penas por si acaso” en su tema Revolá, haciendo que todos los presentes bailaran.

La cita no quiso perdérsela nadie. Malagueños de todas las edades recorrían de punta a punta el Dique de Levante en busca del mejor sitio para ver a sus artistas favoritos.

Poco a poco la explanada se iba llenando de gente al mismo tiempo que el sol comenzaba a esconderse en el horizonte. Y así, con unos cinco minutos de retraso, saltó a las tablas del escenario malagueño el grupo Cariño.

“Que viva el pop y Málaga”. Así arrancaron “las cariño”, como muchos de sus seguidores las llaman, su actuación en el Brisa Festival antes de comenzar a cantar Mierda seca y asegurar a su público que si pudiera estar sin ellos ya lo estaría, pero todavía le hacen falta.

Nadie salió indiferente de este concierto. Todos lo dieron todo, y es que el público no dejó de saltar ni un segundo, hasta que sonó el último acorde en los instrumentos de Cariño. Con No me convengo le dejaron claro a los malagueños cuánto los querían, aunque advirtieron que “si me voy es para dejarte con lo bueno”.

Aun así, no dudaron en insistir a los asistentes, a través de Si quieres, que pueden quedarse “toda la vida conmigo, que no me resulta alarmante porque yo quiero lo mismo”.

Y así llegó Viva Suecia. De un momento a otro cayó la noche dieron las 22.10 horas y los de Murcia se apoderaron del Brisa Festival con tan solo el primer acorde de Bien por ti y su “miento cuando digo que te miento cuando digo que te miento cuando digo me hace falta espacio” porque si hablamos de espacio en el Dique de Levante a esa hora ya no cabía ni un alfiler.

Viva Suecia se apoderó del lugar. Su música llegó hasta la playa de la Misericordia y mientras ellos lo daban todo encima del escenario, a pie de pista se cumplían los sueños de muchos pequeños y mayores.

Con lágrimas en los ojos, saltando sin parar o a hombros de uno de sus padres vivía en primera fila una niña en el concierto de su grupo favorito. A su lado, un par de veinteañeras volvían a ver a su grupo favorito y al otro lado un grupo de amigos saltaban, reían y cantaban sin parar las canciones de los murcianos.

“Sé que me voy a largar con la sensación de perder lo que creo que quiero” porque Lo siento no podía faltar en este setlist, seguido de Dolor y Gloria, donde contaron que “el escenario se ha comido al actor”.

Esta noche tocaba “hacer un poquito mejor el mundo” y por eso, pese a leerlo en una taza y ser “consciente del peligro”, le desearon a Málaga lo que se merece a través de los acordes de ‘Lo que te mereces".

Sin preverlo, Viva Suecia cumplió la misión que se habían propuesto en Hacernos polvo, consiguieron “pintar estrellas en tu cielo más oscuro” con ‘Deja una luz encendida’ y sin que los malagueños se dieran cuenta, el grupo les permitió ser testigos de una de las grandes sorpresas de la noche.

Siloé se subió al escenario del Brisa Festival 24 horas antes de lo previsto. Hace tan solo unas semanas ambos grupos sacaron el tema Sangre y Málaga ha sido testigo de una de las primeras veces en las que se han juntado en directo para cantar este tema.

Y entre papelillos, bailes y aplausos, Viva Suecia volvió a Málaga una vez más tal y como llevan haciendo 11 años. “Málaga es increíble. Una noche más e irrepetible en un sitio muy bonito”, señaló su vocalista Rafa Val.

Tras ellos se subieron al escenario Varry Brava y su Chicas, donde todos iban a pasarlo bien. La jornada se cerró con la sesión de Juanca & Pope Supersub DJ.