Los narcopisos o puntos de venta de sustancias estupefacientes han aumentado en la Comunidad de Madrid como consecuencia de la presión policial realizada sobre la Cañada Real, según recoge la Fiscalía madrileña en su Memoria del año 2024 a la que ha tenido acceso Madrid Total.
Aunque la Cañada Real aún sigue siendo un punto 'caliente' de venta de drogas, lo cierto es que los narcotraficantes están trasladando su actividad de distribución a otras zonas de Madrid.
En total, todos los delitos relacionados con la salud pública suben en 2024 un 15,8%, con 3.916 expedientes el pasado año frente a los 3.382 de 2023.
Además, se confirma una tendencia al alza de los delitos de tráfico de drogas con grave daño a la salud. En concreto, en el año 2024 se contabilizaron 1.842 delitos de esta naturaleza, mientras que en 2023 ese número fue de 1.545, lo que supone un aumento del 19,2%.
La Fiscalía también destaca el auge de entregas controladas de paquetes que contienen MDMA, detectándose la existencia de organizaciones criminales que elaboran la sustancia en España y la remiten a países de Sudamérica.
En 2024, desde la Sección especializada en tráfico de drogas de la Fiscalía Provincial incoaron 21 diligencias de investigación preprocesales, frente a las siete del año anterior.
A fecha 31 de diciembre, 93 causas por tráfico de drogas en la Comunidad de Madrid se encuentran en fase de instrucción y 169 personas se encuentran en situación de prisión provisional.
Según consta en la Memoria, la actividad de las organizaciones criminales sigue intensificándose, con multitud de investigados, muchos de ellos en situación de prisión provisional, lo que hace necesario que las reuniones con las unidades investigadoras sean constantes.
Además, el aeropuerto de Barajas es un punto clave en las operaciones antidroga.
En el documento de la Fiscalía se expone que durante 2024 se incautaron 6.513.506 gramos de cocaína en las instalaciones del Adolfo Suárez.
Una de las operaciones más destacadas fue la bautizada como Traveller que tuvo lugar en el mes de marzo.
Esta intervención terminó con 7 detenidos y 165 kilos de cocaína incautados junto con un arma de fuego corta.
Se detuvo a los principales receptores de la droga en Madrid que se hacían pasar por pasajeros para rescatar maletas.
Otra operación que se destaca en la Memoria 2024 fue la bautizada como Ghost Air, que tuvo lugar en el mes de noviembre.
En ella, se detuvo a 7 personas y se incautaron 191 kilos de cocaína. El modus operandi de esta banda era el mismo que en la operación Traveller, con narcotraficantes disfrazados de pasajeros para recepcionar la droga.
