Madrid se convierte en la nueva ‘ciudad del amor’ de España: este es el motivo por el que cada vez hay menos divorcios

Pese a que Madrid es una de las comunidades españolas con mayor número de habitantes, lo que haría pensar que es más probable que sea uno de los lugares que más divorcios tiene, en esta materia está por debajo de la media nacional. De hecho, ocupa la cuarta posición entre las regiones que menos ostenta.

Y es que en el pasado año el número de demandas de disolución matrimonial por cada 100.000 habitantes en España fue de 199, según un estudio realizado por el Consejo General del Poder Judicial.

En este sentido, Madrid presenta 181,2 demandas de divorcio, lo que la coloca muy por debajo de la cifra nacional y la posiciona como la cuarta en esta lista. Por lo tanto, acompañándola por debajo de la media se sitúan exactamente diez comunidades autónomas: Galicia, con 195,2; Navarra, con 194,9; Cataluña, con 193,3; Asturias, con 192,2; Cantabria, con 187,9; Aragón, con 184,4; Extremadura, con 180,3; Castilla y León, con 169,7; y País Vasco, con 168,1.

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En total, en 2024 en la región madrileña se presentaron 12.405 demandas de divorcio. Eso significa un aumento del 12,66% con respecto a las registradas en el anterior año, el 2023, según los datos recogidos por el Servicio de Estadística del Consejo General del Poder Judicial.

Este incremento interanual devuelve estos procedimientos a cifras muy similares a las del 2022, año en el que el número total de demandas de disolución matrimonial fue de 12.362 en la Comunidad de Madrid.

Los datos nacionales

En general, ha habido un incremento global de estas. Según recoge el informe, las demandas de divorcio consensuadas registradas en los órganos judiciales en 2024 (6.967) experimentaron un incremento interanual del 12,7%, mientras que los divorcios no consensuados (5.016) crecieron un 13,4%.

Y no solo eso, ya que las demandas de divorcio no consensuado, las de divorcio consensuado y las separaciones consensuadas, han sufrido aumentos por encima del 10%. Estas últimas, las separaciones consensuadas, fueron 308 frente a las 280 del ejercicio anterior.

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La excepción son las separaciones no consensuadas (114), las únicas que han disminuido. En concreto, la cifra sería un 8,8%. En cuanto a las nulidades matrimoniales, han incrementado solamente una más con respecto al año anterior: de siete a ocho.

Por otra parte, las tasas más altas, y que se encuentran por encima de la media nacional, se dieron en Canarias, con 236,4 demandas de disolución matrimonial por cada 100.000 habitantes; Comunidad Valenciana, con 221,9; Andalucía, con 221,6; Baleares, con 219,9; Murcia, con 212,3; La Rioja, con 206,7; y Castilla–La Mancha, con 204,6.