La Fiscalía Provincial de Madrid solicita 18 meses de prisión para el hombre que mató a la perra de su expareja sentimental para causarle sufrimiento.

El acusado, que responde a las siglas de R. C. P. y tiene 26 años, ya había golpeado en "repetidas" ocasiones al animal, de nombre Bella, tal y como detalla el Ministerio Público en su escrito.

La Fiscalía le atribuye un delito continuado de maltrato animal y le aplica la agravante consistente en cometer el delito por razones de género.

Según el relato del fiscal, entre los meses de abril y julio de 2020 el acusado residía con su pareja sentimental en Madrid. Durante ese espacio de tiempo, "y con la finalidad de causarle daño a ésta", agredió en varias ocasiones a la perra de la joven.

El 1 de abril de 2020, le dio golpes en la cabeza "con un objeto no determinado, causándole en la frente dos orificios que penetraban en la piel" y que requirieron tratamiento veterinario y farmacológico para su curación.

En torno al 2 de junio de 2020, el acusado —detalla el escrito— propinó golpes a la perra, ocasionándole una inflamación en una de sus patas. Su dueña volvió a llevarla al veterinario.

"El día 1 de julio de 2020, el acusado golpeó a la perra ocasionándole que entrara en parada cardiorrespiratoria, por lo que él mismo la llevó de urgencia a una clínica veterinaria donde se procedió de inmediato a efectuar maniobras de reanimación, así como a intubar al animal, pese a lo cual no se pudo evitar su fallecimiento", narra la Fiscalía de Madrid.

Al morir, el animal presentaba, además, un hematoma de color morado oscuro tras la oreja izquierda y dos rojeces bajo uno de sus párpados. De acuerdo con la autopsia, la causa de la muerte del animal fue un "shock hipovolémico debido a la rotura del hígado".

Por todo ello, la pareja del acusado tuvo que pagar la realización de la necropsia (56 euros) al Hospital Clínico Veterinario Complutense-UCM y 235 euros más a la empresa que recogió e incineró el cadáver. Por todo ello, en concepto de responsabilidad civil, la Fiscalía solicita que R. C. P. pague ambas cantidades e indemnice a su expareja en 3.000 euros por los daños morales.