El pasado mes de marzo, en una operación de la Policía Nacional bajo la dirección de la Audiencia Nacional, se desmanteló en Pontevedra el "mayor laboratorio" para el procesamiento de pasta base de cocaína en Europa. En el marco de la intervención, en la que participaron también autoridades de Portugal y Colombia, se detuvo a 18 personas, 12 de ellas en Galicia. Al presunto jefe del grupo, Hernando Sánchez Rey, le arrestaron al salir de su chalé de la Finca Country Madrid, una de las urbanizaciones más lujosas de Madrid y hogar de grandes fortunas y deportistas de élite. 

Antes de detenerle, los agentes de la Brigada Central de Estupefacientes se mimetizaron con el entorno para poder vigilarle de cerca. Se disfrazaron de repartidores de Amazon y otras empresas, según desvela Caso Abierto. Por las noches, los policías se hicieron pasar por vecinos adinerados utilizando vehículos de lujo requisados a otros narcos en operaciones policiales. 

Hernando Sánchez Rey es el hermano de German Sánchez Rey, conocido como 'El Coletas', un narcotraficante colombiano que fue durante décadas uno de los nexos más fuertes del tráfico de cocaína de Colombia con destino Galicia y que actualmente se encuentra en prisión. 'El Coletas' es el hombre de confianza de Daniel 'el Loco' Barrera, el gran capo de la cocaína colombiana.

[Hasta 200 kilos al día: el mayor laboratorio de cocaína de Europa se escondía en Pontevedra]

Hernando se encargó, según Infobae, de levantar en la localidad pontevedresa de Cotobade el laboratorio que transformaba la pasta de coca en cocaína lista para su consumo. El hermano de 'El Coletas', sin embargo, no viajó nunca en persona a ver el laboratorio gallego.

Pese a que estaba en libertad, ya había sido investigado en otras ocasiones. En la acaudalada urbanización madrileña, llevaba una vida de "lujo". No consta que tuviera un trabajo conocido. 

La Policía Nacional sigue investigando los posibles nexos entre el cártel colombiano con otros de México, ya que entre los 18 detenidos había dos ciudadanos de ese país. Entre los arrestados también hay varios ciudadanos españoles, viejos conocidos de la Policía y que ayudaron desde las Islas Canarias a los narcos suramericanos. 

La intervención en el chalé de Pontevedra se llevó a cabo por efectivos del Grupo Especial de Operaciones (GEO) de la Policía, aunque los ocho cocineros -seis colombianos y dos mexicanos- no plantearon resistencia. Se efectuaron 14 registros y se intervinieron 1.300 kilos de pasta base de cocaína, así como inmuebles por valor de 1,7 millones de euros y 37 productos financieros.