Visitar una ciudad por su historia y los elementos que se conservan de ella es algo que muchas personas llevan a cabo a la hora de hacer turismo, ir de vacaciones o pasar el tiempo libre. Madrid cuenta con muchos de esos rincones en los que ocurrieron hechos importantes hace años, incluso que recogen parte de la historia de otros países. 

Este es el caso de Alemania, más concretamente Berlín. ¿Por qué están relacionadas Madrid y esta ciudad alemana, además de por ser las capitales de sus respectivos países? En este caso, la respuesta nos lleva al 13 de agosto de 1961, día que se empezó a construir el Muro de Berlín. Este elemento dividió la ciudad en dos partes durante 28 años, con la intención de separar por ideologías, pero alejando a miles de personas.

Lo que comenzó como una alambrada, se fue convirtiendo en una gran pared, cuya medida alcanzó los 4 metros de altura y se reforzó con hormigón y cables de acero para hacerlo más resistente. Además de ello, junto al muro se realizó un espacio al que llamaban la "franja de la muerte", que conformaba un foso, una zona de alambre y una carretera por la que no dejaban de pasar coches militares que controlaban la situación y que nadie intentase saltar el muro. 

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El Muro de Berlín significó una privación de libertad inmensa y, por ello, el momento en el que se derribó es aún más histórico que cuando se construyó. La fecha en que comenzó a echarse abajo fue en mayo de 1989, con motivo de buscar la apertura de fronteras entre Austria y Hungría. No fue hasta noviembre de ese mismo año que se permitió el paso hacia el oeste por parte del gobierno de la RDA.

Conociendo estos dos momentos clave de la historia mundial, puede que te interese conocer cómo era este muro 'en directo', pero la idea se descarta al pensar que hay que viajar hasta Berlín para ello. Lo cierto es que no es necesario hacerlo, pues, en el mismo Madrid ciudad, hay alojados tres trozos de este muro histórico. 

Fuente del Parque de Berlín.

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Pero ¿dónde encontrar partes del Muro de Berlín en Madrid? El nombre del lugar en cuestión nos da muchas pistas sobre ello, pues se trata del Parque de Berlín, ubicado en Chamberí, en el barrio de Ciudad Jardín, y al que se accede por la avenida de Ramón y Cajal, número 2. 

Según se puede leer en la web de turismo del Ayuntamiento de Madrid, este parque urbano fue “creado en 1967, se llama así por su cercanía al Colegio Alemán y por la visita a Madrid en 1966 del entonces alcalde de Berlín, Willy Brandt, que finalmente se realizó en 1967. Los alemanes residentes en Madrid financiaron un monolito en honor a su ciudad, que se colocó en el parque y que hoy permanece allí, aunque la placa de cerámica no es la original”.

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Además de los componentes habituales de cualquier parque como zonas arboladas, fuentes ornamentales, columpios y demás, se puede decir que su atractivo principal son las tres partes del Muro de Berlín que se hallan en la parte más baja del parque, zona dedicada a la ciudad, y dentro de la fuente principal y ubicada frente a la iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe.

Los restos del muro fueron cedidos a España en noviembre de 1990 y consisten en tres fragmentos con grafitis originales, que guardan una anécdota: esas pintadas casi desaparecen por un empleado municipal que pensó que los grafitis eran una gamberrada del momento y debían ser limpiados, algo que se consiguió evitar, pudiendo conservar los trozos del muro en mejor estado posible.