Reina Roja, la serie top ventas basada en el libro del mismo nombre, ha invadidado el centro de Madrid. En la Plazuela de Santiago, a pocos metros del Palacio Real, hay un edificio cuya pared ha pasado del amarillo a estar llena de color.

En la fachada se puede ver a escala real, en sus 14 metros de altura, un edificio de viviendas habitado por los personajes de la serie de Amazon Prime. Pistas, detalles y escenas de la serie son las que el autor de la obra explica que "convierten la pared en una historia en sí misma".

Se trata de Félix Díaz de Escauriaza, ilustrador madrileño que ha llevado a cabo el diseño de este proyecto. "Prime Video se puso en contacto conmigo porque conocían algunos de mis trabajos previos en los que he ilustrado paisajes y edificios de Madrid y querían hacerle un regalo especial a la ciudad", cuenta el artista en conversación con este periódico.

Como explica, la idea era crear un mural emblemático que sirviera como lugar de referencia para los seguidores del universo de Reina Roja. "Debía inspirarse en él, pero por lo demás me dieron absoluta libertad creativa", comenta el ilustrador que añade como anécdota que le sirvió de gran ayuda haberse leído el libro antes de recibir este encargo. "Me presentaron la fachada que serviría como lienzo y después de un trabajo previo visitando la zona y los edificios de su entorno, llegué hasta el primer boceto".

Un mes ha sido el tiempo que ha tardado en realizar el trabajo, desde la llegada de la propuesta hasta que le ha dado la última pincelada. Desde finales de febrero hasta el último día de marzo. "Teniendo en cuenta la envergadura del proyecto y aspectos como la puesta a punto de la pared, desde su estado inicial a su reparación total antes de pintar, creo que todo ha fluido de manera extraordinaria", añade el ilustrador.

La creación del mural

Define la elaboración del mural como un "reto". "Era la primera vez que me enfrentaba a un proyecto de estas características y todo lo que conlleva a la hora de planificar el proceso, desde el boceto hasta la última versión coloreada". Por eso, explica que fue esencial contar con la ayuda de un experto en murales, el canario Erik Air, y su equipo formado por Betoalaboquilla y Makarron -sus nombres artísticos-.

El proceso empezó por el diseño de la ilustración, cuidando la elección de la paleta de colores para que el resultado quedara bien integrado con el resto de edificios de la plaza. "Para ello he utilizado un iPad y software de ilustración digital que me permitía adaptar las texturas y los pinceles al objeto que estoy ilustrando", explica Díaz Escauriaza.

Félix Díaz Escauriaza y Erik Air durante la elaboración del mural de 'Reina Roja'. Cedida

Una vez terminada esta versión final, el cometido del muralista Erik Air era pasarlo a la pared. Para él también fue todo un reto, a pesar de que fuera su especialidad. Las dificultades que enumera principalmente eran tres: los andamios sobre los que pintaban, la lona que lo cubría todo y adaptar un diseño que no era suyo. 

"Normalmente, yo no trabajo con andamio, uso maquinaria de elevación", afirma Erik Air. Este tipo de herramienta permite que la persona no se mueva, ya que son los brazos elevadores los que te desplazan hacia el sitio que necesites con los utensilios. "En un andamio es bastante incómodo porque todo lo tienes que mover contigo por escaleras y pasillos más estrechos", explica el graffitero. Había días que el móvil le marcaba 14 kilómetros, 18.000 pasos o 49 pisos subidos dentro del andamio.

Uno de los bocetos del diseño de Félix Díaz Escauriaza para el mural. Cedida

Por otra parte, tenían que pintar a ciegas ya que todo el trabajo estaba cubierto por una lona para que los transeúntes no lo pudieran ver. Lo que dificulta la labor a la hora de tomar distancia para visualizar la evolución del trabajo.

En el tema de adaptar el diseño de su compañero de proyecto, "es algo que hay que estudiar bastante bien. Hay que mirar la imagen, analizarla, ver los colores, los contrastes que hacen entre sí... Hay que pensar como él", cuenta el muralista. 

"Inicialmente tuvo que dividir y encajar las líneas maestras de mi ilustración, y después aplicar el color a cada zona utilizando como referencia mi diseño y los códigos digitales de la paleta que yo había empleado", añade el ilustrador Díaz Escauriaza. Ambos definen este trabajo como una "experiencia enriquecedora" de la que aprender y superarse.

"Se me hace raro ver cómo los turistas y los propios madrileños quieren hacerse fotos junto a la pared. Es una satisfacción enorme y un honor que una ilustración mía forme parte del paisaje de Madrid, espero que por muchos años", dice el ilustrador.

Reina Roja y Prime Video

Perteneciente a la trilogía Antonia Scott, el libro Reina Roja tiene más de un millón de ejemplares vendidos, y ha consagrado a su autor, Juan Gómez-Jurado, como uno de los máximos exponentes del género thriller en el ámbito internacional. 

La novela salió a la venta en 2015 y ha sido en febrero de este año cuando Amazon Prime ha decidido apostar por él y reproducirlo en su plataforma en formato de serie. La acogida ha sido gratificante en el ranking de visualizaciones de más de 120 países del mundo, entre ellos Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, India, México o Australia. Debido a esto, la plataforma ha confirmado su renovación para una segunda temporada.

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Por eso, Jesús Fernández García, brand manager de la Amazon Prime, tuvo la idea de crear algo que "perdurase" y supusiera una renovación de un lugar de la capital española. "Queríamos que la localización fuese lo más próximo a las ubicaciones reales de la serie", cuenta. La narrativa de la historia tiene lugar en el Barrio de las Letras y Lavapiés. Lugares cerca del centro y, por lo tanto, de la fachada donde los fans del libro y la serie podrán encontrar esta obra y hacerse una foto de recuerdo en su visita a Madrid.