
Alberto González Amador, el pasado 10 de abril.
La mujer del directivo de Quirón vio "normal" vender su negocio al novio de Ayuso y niega que fuese una comisión
La esposa del presidente de Quirón Prevención ha declarado como investigada por la venta de su empresa cosmética a Alberto González Amador.
Más información: La juez cita como investigada a la mujer del presidente de Quirón Prevención, con el que el novio de Ayuso hizo negocios
Gloria Carrasco, esposa de Fernando Camino, presidente de Quirón Prevención, ha declarado ante la juez que la investiga que consideró "razonable" y "normal" que el empresario Alberto González Amador comprase por medio millón de euros su negocio de estética.
González Amador es el novio de Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid. Dedicado a la intermediación en la venta de productos sanitarios, hizo negocios con Quirón Prevención, filial del grupo Quirón encabezada por Camino.
Y Maxwell Cremona SL, una de las empresas de González Amador compró en 2020, por 500.000 euros, la compañía cosmética Círculo de Belleza SL, de la que era administradora Carrasco.
La Fiscalía cree que este pago, en realidad, fue una "comisión encubierta" que respondía a los contratos que el novio de Ayuso había recibido de Quirón Prevención.
Por ello, la juez Inmaculada Iglesias citó a declarar a Carrasco, quien, este jueves, ha defendido la legalidad de esta operación y ha negado cualquier comisión irregular.
Cuando González Amador declaró como investigado, también defendió la "legalidad" de sus negocios con este grupo sanitario.
Fuentes presentes en el interrogatorio de Carrasco indican a EL ESPAÑOL que las acusaciones populares, ejercidas por Más Madrid y el PSOE, han insistido en preguntarle por la venta de una "empresa vacía de valor", en alusión a Círculo de Belleza SL, al novio de Ayuso por medio millón de euros.
En esta pieza separada, la magistrada Inmaculada Iglesias indaga, en efecto, si González Amador ocultó ingresos provenientes de este grupo médico y que, supuestamente, debían ser declarados por Maxwell Cremona, mercantil de la que es administrador.
Por ello, en esta rama de la causa, el novio de Ayuso figura como investigado por los supuestos delitos de administración desleal y corrupción en los negocios privados.
En la otra pieza de este caso, la principal, González Amador fue investigado por un presunto fraude fiscal de más de 300.000 euros. Iglesias ya propuso enviarle al banquillo de los acusados por esta porción del procedimiento.