La Asamblea de Madrid, la cámara regional en la que se aprueban las leyes que afectan al día a día de los madrileños, se ha vuelto a convertir en un ring lleno de reproches entre los principales grupos de la oposición (Más Madrid y el PSOE) y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.

Durante la sesión de control al Gobierno regional, la líder de los populares madrileños ha pasado de llamar "su jefa la de la plancha" a la líder de Sumar y vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, a asegurar que "estamos a dos tardes de que Bildu nos llame terroristas".

Ayuso ha respondido así tanto al líder de los socialistas, Juan Lobato, como a la de Más Madrid, Mónica García, en su turno de intervención. Estrenando mayoría absoluta, la presidenta se ha mostrado pletórica y alardeando del "millón de votos" que el PP sacó en elecciones autonómicas por encima de la propuesta de Más Madrid.

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Y es que, después de que Mónica García haya acusado a su Ejecutivo de estar muy "verde, y no precisamente en temas ecológicos"; Ayuso ha contestado que para estar "tan verdes", les pusieron "la cara colorada en las urnas". Haciendo referencia a los resultados electorales del pasado 28-M.

Además, la presidenta ha traído a la Cámara el debate de la amnistía asegurando que "su jefa la de la plancha", en referencia a la líder de Sumar, Yolanda Díaz, ha subido a Bruselas "para reunirse con un prófugo de la justicia". "Pero de eso no les gusta hablar".

Ayuso ha vinculado los votos obtenidos por Más Madrid en las urnas con que en el Congreso estén representados por la "señora de la plancha". Del mismo modo, Ayuso ha reprochado a García la rebaja a la pena de un miembro de 'La Manada' en aplicación de la ley del 'Sí es sí', criticando lo que su partido ha "hecho por el feminismo". 

El caso del Tito Berni, la reducción de penas a un condenado por 'La Manada' a raíz de la aplicación de la ley 'Sí es sí' y que las "agresiones se disparen", han sido otros de los argumentos usados por Ayuso para atacar a Mónica García. 

ETA y Bildu

En lo que respecta al PSOE, Juan Lobato ha preguntado a la presidenta si va a venir a la Asamblea a "hablar de los problemas de Madrid" y no a hacer "los numeritos permanentes de Cataluña y ETA". Algo que la presidenta ha rechazado rotundamente pues, a su juicio, lo que "ocurre en Cataluña" tiene repercusión para los madrileños.

"Viendo cómo se ha retorcido el panorama tanto que estamos a dos tardes de que Bildu nos llame terroristas", ha espetado la presidenta. Al mismo tiempo, ha asegurado que le preocupa lo que pasa en Cataluña porque "todo lo que pasa con los nacionalistas, que no es amor a Cataluña, sino odio al español, lo pagamos desde la Comunidad de Madrid y eso a mí me fastidia".

A modo de ejemplo, ha asegurado que "cuando un hombre de Fuenlabrada tiene que buscar un puesto de trabajo en Cataluña, uno de Madrid lo tiene mucho más difícil por tener un apellido español, castellano".