El cubo naranja de las comunidades de vecinos de Madrid -aquel destinado para la fracción resto, es decir, los residuos de origen doméstico que se obtienen una vez efectuadas las recogidas separadas- deja de recogerse los domingos y los festivos. La medida, adoptada por el área de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de la capital, ha sido duramente criticada por CCOO, que denuncia que las calles de la capital han aparecido "llenas de bolsas de basura". 

El sindicato ha achacado esta situación a la "falta de recogida del cubo naranja los domingos" y a la "desastrosa campaña normativa sobre la medida". A juicio de la organización, se trata de una decisión que nace de la "improvisación" y la "mala gestión" del servicio de recogida respecto al cubo naranja y la distribución de los residuos en los nuevos cubos. 

El nuevo servicio de recogida de residuos arrancó el 1 de noviembre. Entre otros objetivos, el nuevo sistema contempla un incremento en las frecuencias de recogida de las distintas fracciones. "Desde que el nuevo servicio entró en funcionamiento, el Ayuntamiento de Madrid ha situado carteles informativos en las 53.000 comunidades de vecinos de toda la ciudad que se ven afectadas", señalan fuentes del Consistorio a Europa Press, recalcando también que dicha información está disponible en la página web municipal. 

Ajustarse a las normativas estatales

Respecto a la decisión sobre el cubo naranja, el Ayuntamiento de la capital asegura que el objetivo es favorecer la recogida selectiva de residuos y ajustarse "a las diferentes normativas estatales y comunitarias". 

La Ley 7/2022 de residuos y suelos contaminados para una economía circular, que se aprobó el año pasado, contempla aumentar la preparación para la reutilización y el reciclado de residuos municipales hasta un mínimo del 55% en peso en 2025, hasta un mínimo del 60% en peso para 2030 y hasta un mínimo del 65% para 2035. 

Contenedor amarillo, azul y verde

En concreto, para la recogida de plástico, metal y brik, aquella destinada a los contenedores amarillos, se contempla un incremento de 4 a 7 horas por semana. Respecto al contenedor azul, empleado para el papel y el cartón, se prevé un aumento de las frecuencias hasta llegar a un mínimo de 6 recogidas semanales y hasta cuatro veces diarias en las zonas de mayor demanda, así como la implantación de sensores de llenado y recogida según necesidades. 

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En cuanto al contenedor verde, el utilizado para el vidrio, también se prevé sensores de llenado en 1/3 de los contenedores y acciones de información en el canal Horeca (hoteles, restaurantes y cafeterías). La recogida de los residuos orgánicos, por otro lado, cuentan con una frecuencia fija.