La borrasca 'Aline' causó este jueves, a su paso por Madrid, afectaciones en los servicios de alta velocidad, trenes de corta distancia y varías líneas de metro, además del corte de carreteras. Las intensas lluvias obligaron a activar la alerta amarilla en la región y provocaron fuertes inundaciones también en calles y hospitales.

Este viernes las lluvias han remitido y se ha podido restablecer todo el transporte público. En metro, la línea 5 ha sido la última en retomar su circulación sobre las 11 horas de la noche. Además, el Cercanías ha recuperado sus frecuencias habituales y los autobuses de la EMT ya mantienen sus itinerarios.

Los Bomberos de la Comunidad de Madrid realizaron desde las 11 hasta las 22 horas de este jueves 163 intervenciones por problemas ocasionados por las fuertes lluvias, ninguna de especial gravedad, según informó un portavoz de Emergencias 112. En este periodo de tiempo, el centro regional de Emergencias gestionó 982 expedientes relacionados con la lluvia, sobre todo por balsas de agua en la vía pública, inundaciones en sótanos, caída de ramas y árboles, ninguna de ellas grave.

Se trata de un fenómeno climático histórico en Madrid, ya que durante el jueves se registró la mayor cantidad de lluvia en 24 horas en más de un siglo. 

En concreto, la estación meteorológica de Madrid-Retiro acumuló un total de 90 litros por metro cuadrado entre las 9 de la mañana y las 6 de la tarde.

Cortes en transporte 

En la red de transporte público, a primera hora de la tarde se registraron cortes en varias líneas de Metro de Madrid y en el servicio de Cercanías de Renfe por acumulación de agua en las instalaciones.

En el caso del suburbano, se interrumpió la circulación de trenes en Línea 5 entre las estaciones de Pirámides y Urgel, en ambos sentidos, y en Línea 7 entre las de García Noblejas y Cartagena, también en ambos sentidos, y en la Línea 1, entre Miguel Hernández y Congosto. Además, durante un tramo de la tarde los trenes no pudieron efectuar parada en la estación de Legazpi de la Línea 6 ni en la de Banco de España de la Línea 2, también por acumulación de agua en las instalaciones.

En las últimas horas de la tarde, Metro Madrid fue restableciendo la circulación de todas las líneas. La última en hacerlo fue la línea 5, sobre las 11 horas de la noche. En la mañana de este viernes tan solo ha informado de circulación lenta en la línea 10 entre Las Tablas y Tres Olivos, ambos sentidos, por incidencia en las instalaciones.

Por otro lado, la caída de un árbol sobre la catenaria ha interrumpido la circulación entre El Escorial y Villalba en la línea C-8. Para garantizar movilidad de los clientes se estableció un servicio alternativo por carretera entre ambas estaciones, ha informado Renfe.

También hubo afectaciones por acumulación de agua en las líneas C-3A, C-8 y C-10, con la parada comercial suspendida de Pinar de las Rozas para los trenes que circulan hacia Madrid por inundación de un paso inferior en la estación. Esta mañana Adif ha informado de que estas líneas están recuperando progresivamente sus frecuencias de paso habituales.

Por otro lado, la EMT ha avisado de que han finalizado las incidencias en la calzada a causa de las lluvias que estaban modificando los itinerarios de las líneas de autobuses en la capital.

Además, una incidencia en la explotación ferroviaria que afectaba al sistema de electrificación de la línea de alta velocidad entre Madrid y Barcelona a la altura de la provincia de Guadalajara obligó a cortar la circulación de trenes, que se restableció horas más tarde. El operador achacó la incidencia al temporal de lluvia.

Por este motivo, Adif ha dejado abiertas durante toda la noche las estaciones de Santa Justa, en Sevilla, Córdoba, Sants en Barcelona y Atocha en Madrid para aquellos viajeros que puedan tener dificultades a la hora de desplazarse por el temporal. 

Cortes en carreteras

En cuanto a la red de carreteras, durante este jueves se registraron complicaciones en todos los accesos y salidas de la capital, con cortes durante la tarde en tramos de la M-40 en el Barrio de La Fortuna, hacia la A-4, en la M-50, a la altura de Rivas, y circulación impracticable en toda la A-42.

Los principales problemas circulatorios se registraron en la A-3, en Vallecas, la A-4, en Butarque, la A-5, en Alcorcón, y la A-6, en Galapagar, en sentido entrada, mientras que en sentido salida se concentraron en la A-1, en Alcobendas, y en la A-4, en Pinto.

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Además, la M-40 registró circulación congestionada en la práctica totalidad de sus tramos y tuvo que ser cortada al tráfico durante varias horas por acumulación de bolsas de agua en el Barrio de La Fortuna, hacia la A-4. Igualmente, la M-50 también cerró al tráfico a la altura del kilómetro 31, en ambos sentidos, a la altura de la localidad de Rivas, durante una parte de la jornada. 

Dentro de la capital, además, se registraron incidentes en varios puntos, bien por formación de bolsas de agua, bien por accidentes leves de circulación. 

Daños en hospitales

Por otro lado, también se produjeron daños en hospitales. Los trabajadores de varios hospitales del Servicio Madrileño de Salud (Sermas) denunciaron inundaciones en varios centros hospitalarios como el Infanta Sofía, en San Sebastián de los Reyes, el Infanta Leonor, 12 de Octubre, Ramón y Cajal o La Paz, "muchos de ellos construidos hace muchos años y sin labores de mantenimiento", según indicaron los sindicatos.

Además, personal del centro comercial de la Vaguada, situado en el madrileño barrio del Pilar, acordonó una zona por la caída de unos falsos techos debido a la acumulación de agua producida por las fuertes lluvias.