“I can hear it in your voice and it shows in your eyes. Lies, no more lies. All I want is no more lies” Neal Schon.

El presidente del Gobierno volvió a mentir sin control en el debate con Nuñez Feijóo. Y ya no pueden decir que son errores por los nervios del directo porque Patxi López las reiteró todas en el debate de RTVE. Un grupo de economistas, incluyendo a María Blanco, Lorenzo Bernaldo de Quirós, Ignacio Ruiz-Jarabo, José María Rotellar, Manuel Parejo, José Ramón Riera y yo mismo hemos desmontado la ristra de falsedades repetidas en campaña.

Lo más vergonzoso es decir que España es el país que más crece de la Unión Europea. Según los datos oficiales de Eurostat en el primer trimestre de 2023 –último dato conocido- Polonia, Luxemburgo, Portugal, Croacia, Chipre, Italia, Letonia, Eslovenia, Suecia, Bélgica y Bulgaria crecen más que España. Además, en el periodo 2019 a primer trimestre de 2023, España se sitúa a la cola de la recuperación, el penúltimo seguido de la República Checa. España solo ha recuperado el PIB de 2019 en junio y eso, tras despilfarrar el mayor estímulo fiscal y monetario de la historia, además de 79.000 millones de euros de Fondos Europeos, es un fracaso sin precedentes. No podemos olvidar que en el mismo periodo el Gobierno de España es el que más ha aumentado la deuda pública sobre PIB.

Miente también sobre el empleo. España ha perdido seis puestos en convergencia con la Unión Europea en reducción de paro y creación de empleo. Es falso que hayan creado más empleo que ningún presidente. Los presidentes no crean empleo, pero incluso si aceptamos su forma de analizarlo, durante el mandato de Aznar y Rajoy se crearon muchos más empleos, según datos de la Encuesta de Población Activa (EPA).

Y eso con un maquillaje como es el de disparar la contratación pública tirando de deuda. El 56% del empleo creado en la legislatura es público, y no “sanitarios” sino en su mayoría el concepto de “otros”. Las horas trabajadas siguen muy por debajo de los niveles de 2019 y todavía menos con respecto a 2008, según la EPA. Primer trimestre de 2008: 9.117.942,3 (miles de horas). Primer trimestre de 2019: 8.554.873,9. Primer trimestre de 2023: 8.476.989,8 (datos INE). Como muchos de los ministros de Sánchez decían “no se crea empleo, se trocea”.

El 56% del empleo creado en la legislatura es público, y no “sanitarios” sino en su mayoría el concepto de “otros”

Es además muy preocupante que alguien que dice siempre que han hecho un escudo social y se preocupan por los pobres mienta sobre la realidad del empobrecimiento de la población española. España se sitúa en el cuarto puesto en tasa de pobreza y exclusión social y ha caído a nivel de 2011 en renta per cápita ajustada por poder adquisitivo respecto a la UE.

Sánchez miente también sobre la inflación. Los precios no bajan, siguen subiendo. En junio han subido y en cuatro de los últimos seis meses han subido también. La inflación solo se modera en el dato interanual porque el dato base era muy elevado. Y la inflación es acumulativa. La inflación ha aumentado un 15,7% desde que gobierna Sánchez, según datos del INE.

A Nuñez Feijóo solo se le puede achacar una mentira o un error. El número de autónomos. La cifra de autónomos en junio de 2018 era de 3.217.169 y en el último dato 3.351.000.

Una de las mentiras más sangrantes de Sánchez fue negar que ha acordado con Bruselas imponer peajes a todas las autovías. Por supuesto, salieron en tromba todos los documentos firmados en los que se desmontaba esa mentira. Un día después el propio director de la Dirección General de Tráfico (DGT), Pere Navarro, confirmaba que en 2024 se implantarán peajes en las autovías.

El peaje a las autovías es un ejemplo más de expolio fiscal regresivo que se disfraza de un falso compromiso medioambiental.

España se sitúa en el cuarto puesto en tasa de pobreza y exclusión social

Las propuestas incluyen un pago anual de hasta 80 euros dependiendo del vehículo o un coste por kilómetro de hasta cuatro céntimos por kilómetro.

Para los conductores ricos un pago adicional de hasta 80 euros anuales por la llamada “viñeta” no supone nada. La otra propuesta, cobrar cuatro céntimos por cada kilómetro recorrido, supondría un coste de un viaje Madrid-Barcelona de 26 euros, además de todos los impuestos que ya pagamos en las gasolinas y gasóleos, que suponen el 55% del precio total, impuestos sobre vehículos etc.

Para la inmensa mayoría de los ciudadanos es una nueva forma de expolio fiscal sobre algo que ya pagamos en impuestos. El mantenimiento de las carreteras ya se paga y, además, la inversión del estado en cinco años no llega a la cantidad que la DGT recauda en multas en un año. Como pasa con las “medidas climáticas” y los impuestos verdes, pagamos dos y tres veces por la misma cosa.

Los ciudadanos exentos de este impuesto no están definidos. Se habla de no cargarlo a los que usan la autovía para ir y volver del trabajo si “están obligados”, docentes y estudiantes que usen el coche para ir y volver de su centro de estudios y aquellos que necesiten ir en su automóvil para ir al hospital. Pero no respiren aliviados… Verán como esta medida recaudatoria acaba recayendo en la clase media y los trabajadores, como siempre.

[Los peajes entran en campaña electoral: ¿pagaremos por circular en autopista en 2024?]

En España un conductor paga casi 1.070 euros al año en impuestos incluyendo los impuestos que paga el dueño de un automóvil desde que lo adquiere hasta que deja de utilizarlo (según la Asociación Española de Entidades Colaboradoras de la Administración en la Inspección Técnica de Vehículos, AECA). En 2019 los contribuyentes españoles pagamos 30.800 millones de euros en impuestos asociados al automóvil, 21.500 de ellos por combustible.

Según la Asociación Española de la Carretera (AEC), se necesita un gasto de entre 1.600 y 1.800 millones de euros anuales para mantener las carreteras. Es decir, pagamos ya mucho más de lo que supone la inversión en carreteras y los costes medioambientales.

Por supuesto, usted podría decir que esa viñeta o coste por kilómetro es una buena idea si nos reducen o eliminan los impuestos que ya pagamos por esos mismos conceptos, pero ¿sabe qué? No es así. Y es peor, porque los que no tienen coche y usan el transporte público también pagan y pagarán vía presupuestos. Como siempre, es una medida recaudatoria orientada a sacar todavía más dinero del rehén cautivo que es el que tiene una nómina o dueño de un vehículo. Me da igual si en otros países de Europa tienen esta viñeta. Además, el esfuerzo fiscal en esos países es inferior al de España.

Una renta media en España paga con Sánchez 700 euros más solo por IRPF. Pues gracias a Pedro y a Yolanda, todos vamos a pagar mucho más por las autovías que ya pagamos.