A pesar del buen arranque del año, con subidas generalizadas en las Bolsas mundiales en enero, Wall Street ha vivido un primer trimestre mixto, con caídas del 2,5% y del 1,2% para el Dow Jones y el S&P 500 y avances de más del 2% para el Nasdaq, pese al duro castigo sufrido en las últimas semanas por las grandes del sector tecnológico como Facebook o Amazon.

De hecho, estas caídas han incrementado la volatilidad en la principal plaza financiera del mundo que, junto con el miedo a la guerra comercial entre EEUU y China, se han convertido en los dos grandes temas que han movido el mercado en las últimas semanas.

Los expertos confían en que esta semana los inversores, que ahora se mueven al ritmo de las declaraciones de Donald Trump, desvíen su atención a los fundamentales de las empresas, con buenas perspectivas para la gran banca que el jueves da el pistoletazo de salida a la nueva temporada de resultados trimestrales.

¿Se espera una temporada de resultados muy positiva en Wall Street, con las compañías integrantes del S&P 500 presentando un incremento de sus beneficios del 17% en tasa interanual, la más elevada en un trimestre desde el primero de 2011, cuando los beneficios aumentaron el 19,5%¿, recuerdan los expertos de Link Securities.

El gigante financiero BlackRock será el encargado de inaugurar las cuentas este jueves, siguiéndole al día siguiente grandes bancos como JP Morgan, Wells Fargo y Citigroup. Los analistas consultados por Marketwatch prevén una mejora del beneficio del primer trimestre del 20% para BlackRock y Citigroup (comparado con el mismo periodo de 2017), y de cerca del 40% para JP Morgan Chase.

Y atención. Porque la reciente evolución de las Bolsas tendrá mucho que ver en el resultado final de estas entidades, ya que cuanto más bruscos son los movimientos en el parqué, más beneficios para las entidades con mayor porcentaje de su negocio en banca de inversión. Por eso, se espera que Wells Fargo, que tiene menos exposición a Wall Street, limite su mejora de ganancias al 7% en el primer trimestre de 2018.

La vuelta a los fundamentales sería clave para aprovechar los buenos precios a los que, tras las caídas del trimestre, pueden presentar algunas cotizadas. Y los inversores cuentan además con la ventaja de las revisiones al alza de las expectativas de resultados de los últimos meses, ¿algo que no suele ocurrir ya que los analistas, a medida que se acercan las fechas de publicación de resultados optan generalmente por reducir sus expectativas¿, indican los expertos. En concreto, desde Andbank aseguran que esta mejora se ha realizado en el conjunto de las empresas del S&P 500, especialmente por el lado de las ventas.

Pero cuidado con la otra cara de la moneda en este sentido: el haber puesto el listón tan alto conlleva riesgos, y desde Link Securities insisten en que si las empresas no son capaces de batir las estimaciones, como normalmente suele ocurrir, pueden ser castigadas duramente por los inversores.

¿Lo que es una realidad es que, tras los fuertes recortes sufridos por las acciones de muchas compañías y la mencionada revisión al alza de estimaciones, las cotizadas estadounidenses presentan actualmente unos multiplicadores bursátiles mucho más razonables", explican los expertos, recordando que actualmente el S&P 500 registra un PER (2018E) de 16,5 veces,  muy inferior al que presentaba sólo hace un par de meses.

En el caso concreto del sector bancario, que esta semana es protagonista al otro lado del Atlántico, los analistas de Bankinter añaden que cuentan con otros factores a su favor además de la buena perspectiva de resultados: "La mejora de los fundamentales del sector y la intención de Powell de no endurecer la regulación sientan las bases para un buen comportamiento del sector financiero. Mantenemos esta idea pese a las recientes correcciones", explican.