Se trata de una réplica exacta de la que está funcionando desde hace dos años en el estado de Washington (Estados Unidos), según ha explicado a EL ESPAÑOL-Invertia su CEO, Martin Roscheisen.

"Nuestro objetivo es alcanzar una producción de diamantes de millón y medio al año y venderlos en todo el mundo. Los diamantes forman parte de los semiconductores, piezas imprescindibles para vehículos, baterías, teléfonos móviles o cualquier otro dispositivo tecnológico", ha asegurado. 

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En España se fabrican cerca de tres millones de vehículos anuales, (aunque esa cifra ha sido algo más baja en estos últimos años), según datos de Anfac. Si se utilizara cada diamante sintético para cada vehículo fabricado en las plantas españolas, se podría decir que abastecería a la mitad de la producción nacional.

Los semiconductores son la base de la tecnología moderna. Sin ellos, no funcionarían los miles de millones de dispositivos electrónicos y digitales conectados en el planeta. Los semiconductores son productos complejos y de tamaño minúsculo.

"El objetivo es fabricar obleas de diamantes -del tamaño de un plato pequeño- sobre la que se construyen los microcircuitos", añade Roscheisen. Las obleas tienen, de esta manera, una importancia clave en la fabricación de dispositivos semiconductores.

Hoy, solo el 10% de la producción de semiconductores es europea. Los problemas que hay de suministro han puesto en evidencia las carencias de la UE en un mercado que lideró en los años 90.

Inauguración de las obras de construcción de la fábrica de diamantes sintéticos en Trujillo (Cáceres) Invertia

"Es una de las fábricas más ecológicas que existen en el mundo gracias a las últimas tecnologías limpias", ha explicado Roscheisen. "Cristalizaremos metano que se transformará en obleas de diamantes para fabricar vehículos más eficientes". 

El responsable de la compañía explica que además de evitar la extracción de diamantes naturales, la electricidad de esta fábrica provendrá del parque fotovoltaico situado en el mismo emplazamiento a modo de autoconsumo solar. También contará con unas baterías para almacenar el exceso de energía y el agua necesaria para el proceso químico de los diamantes será la de dos depuradoras de Trujillo.

La planta solar será de 120 MW en un terreno de unas 200 hectáreas y la infraestructura de almacenamiento contará con una potencia de otros 60 MW. 

Inauguración de la construcción de la fábrica de diamantes sintéticos de Diamond Foundry en Trujillo (Cáceres) Invertia

"La razón por la que Diamond Foundry eligió Extremadura es porque España produce energía renovable a un precio razonable, gracias a nuestro sol, y además es un mercado estable", ha dicho por su parte José Benjumea, CEO de POWEN. Según ha confirmado el responsable de la compañía, "justo ayer conseguimos la Declaración de Impacto Ambiental para poder llevar a cabo la construcción del parque solar".

"Con esta alianza podremos llevar el autoconsumo solar a más empresas en todo el territorio, protegiéndolas de unos precios de la electricidad inestables y al alza".

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Al acto de la puesta de la primera piedra, que supone el inicio de los trabajos que durarán hasta principios de 2024 -fecha en la que se espera la primera partida de las gemas-, han asistido el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara; el CEO de Diamond Foundry, Martin Roscheisen; el presidente de UNEF, Rafael Benjumea, y el CEO de POWEN, José Benjumea.

Diamantes sintéticos, en horas

Esta nueva fábrica de Diamond Foundry contará con 144 reactores que se instalarán hasta mayo de 2024 para el correcto desarrollo de sus funciones. Seguidamente, se considera la posibilidad de ampliar la capacidad productiva con 288 reactores adicionales para alcanzar un total de 432 reactores.

"Si un diamante natural necesita billones de años para generarse a unas temperaturas y presiones altísimas, estos diamantes los podemos hacer en horas, y son exactamente iguales", ha destacado el CEO de la compañía.

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Los diamantes artificiales se obtendrán con la tecnología de reactor de plasma patentada por Diamond Foundry, que necesita de mucha energía. Los fabricará a través de la deposición química de vapor, un proceso para producir materiales de alta pureza y rendimiento. 

El proyecto cuenta con una inversión total de 245 millones de euros, de los cuales 120 millones de euros han sido adjudicados a Diamond Foundry por el Fondo de Apoyo a la Inversión Industrial Productiva (FAIIP), promovido por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo y gestionado por la empresa pública Sepides; y 81 millones correspondientes a incentivos regionales aprobados por el Ministerio de Hacienda.